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El Informe Global de Competitividad (IGC) 2017-2018, presentado por el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), en el que se hace un recuento económico a 10 años de la crisis financiera mundial, sostuvo que la recuperación económica mundial sigue estando en riesgo, y se debe a la incapacidad de líderes y encargados de la toma de decisiones para realizar los cambios necesarios en competitividad y para el aumento de la productividad.

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Para el caso de México, aunque el Gobierno Federal ha presumido en eventos públicos la aprobación de 11 reformas estructurales en temas de telecomunicaciones, energía, financiero, educativo, laboral, competencia económica, entre otros, el país se mantuvo estancado en la posición 51.

Para el caso nacional comparado con el informe de 2016, seis de sus 12 pilares presentan caídas en competitividad (instituciones, infraestructura, salud y educación primaria, desarrollo del mercado financiero, sofisticación empresarial e innovación), mientras que 3 de ellas se mantienen (eficiencia del mercado de bienes, eficiencia del mercado laboral y tamaño del mercado) y el resto observó un pequeño repunte (ambiente macroeconómico, educación superior y formación y disponibilidad tecnológica).

En el aspecto de infraestructura, México cayó cinco lugares para quedar en la posición 62 desde la 67 a nivel mundial; aquí se consideran dos incisos: Infraestructura de transporte e Infraestructura eléctrica y telefónica.

En cuanto al crecimiento económico señala que “la apertura comercial instrumentada no es suficiente para contrarrestar la erosión del sistema productivo, las empresas nacionales se enfrentan un entorno poco favorable: regulación excesiva e inapropiada para un mundo altamente competitivo, inseguridad pública, altos costos de energéticos, un sistema educativo poco vinculado con las necesidades productivas, infraestructura obsoleta, falta de inversión pública y escaso financiamiento público y privado".

Además, "un sistema tributario enfocado a un grupo cautivo, competencia desleal de la informalidad y de importaciones provenientes de algunos países que no respetan las reglas del libre comercio y ante lo cual la autoridad nacional actúa a destiempo y lentamente”.

Entre estos pilares se encuentran instituciones, infraestructuras, entorno macroeconómico, salud y educación primaria, educación superior y formación, eficiencia del mercado de bienes, eficiencia del mercado laboral, desarrollo del mercado financiero, disponibilidad tecnológica, tamaño del mercado, sofisticación empresarial e innovación.

El IGC se forma con base en datos que comprenden 12 categorías (considerados pilares de competitividad) que colectivamente forman una imagen completa de la competitividad de un país.

Pilares (México): Posiciones de 2017 - 2016 

Instituciones:

123

116

Infraestructura:

62

57

Ambiente macroeconómico:

43

51

Salud y educación primaria:

76

74

Educación superior y formación:

80

82

Eficiencia del mercado de bienes:

70

70

Eficiencia del mercado laboral:

105

105

Desarrollo del mercado financiero:

36

35

Disponibilidad tecnológica:

71

73

Tamaño del mercado:

11

11

Sofisticación empresarial:

49

45

Innovación:

56

55

 

 

2do pilar de Infraestructura:

62

57

Infraestructura del transporte:

38

33

- Calidad de la infraestructura general:

71

69

- Calidad de las carreteras:

52

58

- Calidad de la infraestructura ferroviaria:

65

59

- Calidad de la infraestructura portuaria:

62

57

- Calidad de la infraestructura del transporte aéreo:

67

61

Asientos de aerolíneas disponibles

20

21

 

Fuente: WEF