El consumo, que había sido uno de los motores de crecimiento más importante de la economía, se desacelerara por la caída del salario real derivado de una rigidez de los salarios nominales y un repunte de la inflación originado por el incremento en el precio de energéticos y de mercancías de importación; de hecho, ya han empezado a contaminar las expectativas inflacionarias, por lo que el Banco de México (Banxico) respondió con incrementos en la tasa de referencia.
BBVA Bancomer estima que en lo que resta de 2017, el Banxico suba en 125 puntos base más las tasas, con lo que cerrarían el año en un nivel de 7.25 por ciento. Esto, con el fin de anclar las expectativas de inflación y evitar efectos de segundo orden en los precios
Para Carlos Serrano, Economista Jefe de la institución financiera, las exportaciones mexicanas serán uno de los rubros que mantendrán un buen comportamiento este año por dos razones: el buen momento que está pasando la industria manufacturera estadounidense, y el hecho de que puede ser hacia el final del año cuando se den ajustes a los términos comerciales planteados en el TLC, mientras tanto, las nuestras exportaciones no petroleras seguirán fluyendo al mercado destino de más del 80% de las ventas al exterior.
El crecimiento estimado para la economía estadounidense es de 2.3%, y entro los principales riesgos que podría enfrentar se derivan de una política comercial proteccionista y una política fiscal expansiva que afecte nivel de inflación y tasas de interés con repercusión mundial.
Además, BBVA Bancomer destaca que el 48% de la Inversión Extranjera Directa (IED), en promedio que ingresa al país entre 1999-2015 proviene de Estados Unidos y se enfoca a promover cadenas de valor sofisticadas; es por ello que parte del déficit comercial bilateral que se ubica en alrededor de 63 mil millones de dólares se explica por las cadenas de valor. Ahora bien, derivado de la incertidumbre que ha generado el cambio de política comercial bilateral se prevé un menor ingreso de IED este año, y un golpe más al mercado interno.
Los pronósticos macro de México pueden modificarse (arriba o abajo) de acuerdo a lo que acontezca con la relación México-Estados Unidos: renegociación, anulación del TLC e incluso salida de EU de la OMC. En el escenario más pesimista el tipo de cambio podría llegar a 23 pesos por dólar en 2017.
Por otra parte, Carlos Serrano anotó que “Es crucial que el gobierno cumpla con el objetivo de déficit fiscal para este año. Con ello la deuda como porcentaje del PIB se estabilizará, lo que enviará una señal positiva a los mercados y reducirá la posibilidad de que se baje la calificación de deuda soberana del país”.
El escenario global mejora, pero la incertidumbre sigue siendo elevada, sobre todo por los riesgos de proteccionismo en Estados Unidos.