Las ZEE, que estarán localizadas en el Corredor Transísmico (de Salina Cruz, Oaxaca a Coatzacoalcos, Veracruz; Lázaro Cárdenas (Michoacán y Guerrero), y Puerto Chiapas, buscarán atraer capitales mexicanos y extranjeros ante la nueva coyuntura económica global.
Estos apoyos, según diversos especialistas, son inéditos y tendrán un impacto positivo para los inversores y generarán, al mismo tiempo, un corredor de empleo en la zona sureste del país, la cual tiene altos niveles de atraso económico.
José Antonio Meade, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público explicó, durante la primera sesión de la Comisión para las Zonas Económicas Especiales (ZEE) de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), dijo que después de los diez años en que gocen del descuento de 100% del ISR, los cinco posteriores tendrán un descuento de 50%, y para el mismo lapso, el descuento en cuotas patronales del IMSS será de 25 por ciento.
Dijo además que contarán con un régimen aduanero específico que incluirá reducciones en las cuotas de derechos y exención de impuestos al comercio exterior por la introducción de mercancías en las ZEE, como parte del tratamiento especial en lo referente al pago del impuesto al Valor Agregado (IVA), similares a las que se aplican al comercio exterior.
Por su parte, Pedro Carreón, socio de PwC, dijo que de usarse un esquema de IVA que se aplica a las exportadoras, las empresas no tendrían que solicitar devoluciones de saldos a favor, lo cual será una facilidad administrativa, en tanto que al no haber tampoco traslado de IVA entre los mismos residentes de una o varias zonas económicas, será un aliciente extra.
Aclaró que al estar exentos del ISR, ayudará administrativamente a operar mejor el negocio, porque en un periodo de inversión se irá generando empleo, capacitación a trabajadores, en 15 años estaría desarrollada la región y sería autosustentable.
Otro de los retos es que los empresarios tendrán la tarea de desarrollar economías, capacitar al personal y crear plantillas de trabajadores que sean productivos.
En contraparte, aunque es un verdadero estímulo fiscal, lo anterior puede atraer un efecto de subvención; y al haber apoyo de un gobierno para producir más barato, otros países podrían castigar con impuestos más altos los productos provenientes de la ZEE, señaló Herbert Bettinger, director de Bettinger Asesores.
Como se recordará, existen 118 proyectos de inversión en las ZEE, de las cuales, 24 están en fase avanzada de negociación y cuentan con una cartera de inversión de 7,000 millones de dólares, destacó Gerardo Gutiérrez Candiani, Autoridad Federal para el Desarrollo de las Zonas Económicas Especiales.