En la semana, la depreciación del peso se concentró en las sesiones del lunes y del viernes, y estuvo relacionada directamente con episodios de aversión al riesgo en los mercados financieros globales por el riesgo de incumplimiento del gigante inmobiliario de china Evergrande, lo que también ocasionó pérdidas en los mercados de capitales en las mismas sesiones.
En la semana, el índice ponderado del dólar mostró un avance de 0.15%, fortaleciéndose por tercera semana consecutiva y acumulando un avance de 1.29% en las últimas tres semanas. El dólar se mantuvo fuerte principalmente por dos factores: 1) los episodios de aversión al riesgo que elevan la demanda por el dólar como refugio y 2) la expectativa de que la Reserva Federal probablemente anuncie el primer recorte al programa de compra de bonos el 3 de noviembre, para finalizar con el programa a mediados del 2022, así como la mayor probabilidad de que el primer incremento de la tasa de interés ocurra en la segunda mitad del 2022, esto de acuerdo con las últimas proyecciones de la Fed publicadas el miércoles.
En la canasta amplia de principales cruces, pocas divisas cerraron con una apreciación semanal, siendo las principales la corona noruega que se apreció 1.34%, el dólar canadiense con 0.81% y el franco suizo con 0.77%. La apreciación de la corona noruega se debe principalmente a la decisión el Banco Central de Noruega de subir su tasa de interés en 25 puntos base, a 0.25%, siendo el primer incremento después de la pandemia, indicando también que el siguiente incremento de la tasa de interés podría ocurrir en diciembre y que la tasa podría ubicarse en 1.25% hacia finales del siguiente año. Cabe notar que la corona noruega, a la par del dólar canadiense, también tuvieron impulso por el fortalecimiento de los precios del petróleo, pues el WTI cerró con un incremento semanal de 2.70%, cotizando en 73.91 dólares por barril.
Las divisas más depreciadas fueron la lira turca que perdió 2.34% durante la semana, con el tipo de cambio tocando un máximo histórico de 8.8777 liras por dólar, luego de que a media semana el Banco Central de Turquía recortó su tasa de interés en 100 puntos base a 18%, a pesar de que hay presiones al alza sobre la inflación general. La ausencia de autonomía del Banco Central, envía la señal de que las presiones inflacionarias no propiciarán ajustes al alza de la tasa de interés en los próximos meses. Otras divisas que perdieron terreno fueron el rand sudafricano con 1.57%, el peso chileno con 1.22% y el forinto húngaro con 1.21%. El peso mexicano se ubicó en la posición 15 entre las divisas con una depreciación semanal.
Desde el punto de vista técnico, el tipo de cambio ha respetado la resistencia de 20.20 pesos y el soporte de 20.00 pesos por dólar durante las últimas cinco sesiones, observándose un incremento en la demanda por dólares apenas perforando el nivel de 20.00 pesos. Se espera que el tipo de cambio muestre un comportamiento lateral durante las próximas sesiones, en anticipación al anuncio de política monetaria de Banco de México programado para el 30 de septiembre, cuando se espera un incremento de la tasa objetivo de 25 puntos base a 4.75%.
En la semana, el euro tocó un mínimo de 1.1684 y un máximo de 1.1755 dólares por euro. Por su parte, el euro peso tocó un mínimo de 23.4096 y un máximo de 23.6894 pesos por euro.
Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 20.0640 pesos por dólar, 1.3664 dólares por libra y en 1.1716 dólares por euro.