Para lograrlo, además de los productos y servicios tradicionales del Banco, como los créditos a riesgo proyecto, las garantías financieras, la estructuración de proyectos y líneas de fondos de liquidez a contratistas de obra pública; la institución ofrecerá nuevos esquemas para incentivar la participación del sector privado, como por ejemplo: créditos engrapados, garantías de refinanciamiento y el programa de amortizaciones diferenciadas.
En un comunicado, se detalló que los créditos engrapados ofrecen financiamientos preautorizados en condiciones competitivas a los ganadores de algunas licitaciones públicas. Las garantías de refinanciamiento permiten que los desarrolladores o inversionistas aseguren financiamiento de largo plazo, y a la banca comercial que su crédito será amortizado.
Del Mazo Maza explicó que "el plazo máximo otorgado por gran parte de la banca comercial en México es en promedio de 10 años, menor al que requieren los proyectos de infraestructura que buscan plazos de 20, 25 o hasta 30 años. Lo anterior provoca que el riesgo de refinanciamiento recaiga en los desarrolladores o inversionistas, por lo que las garantías de refinanciamiento mitigan esta incertidumbre y mejoran las condiciones de crédito para los proyectos".
Con respecto al programa de amortizaciones diferenciadas, dijo que estas permitirán empatar ese diferencial de plazo entre la banca comercial con los requerimientos de los proyectos. Agregó que estos productos y servicios pueden complementarse con los que ofrece el Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin), el cual apoya proyectos de infraestructura de alto impacto y gran rentabilidad social para que estos sean financieramente viables.