Lo acontecido con la catedral de Notre Dame, donde un incendio ocurrido el día lunes 15 de abril dejó severas afectaciones en su estructura, ventiló una serie de casos donde otros recintos históricos se vieron dañados por incendios. En algunos de esos casos, fueron insuficientes los trabajos de restauración debido a la gravedad de los daños; sin embargo, en otras edificaciones sí hubo oportunidad de actuar para recuperar las zonas lesionadas.
1. Gran Teatro de Ginebra
Construido en el siglo XIX, en 1951 el Gran Teatro de Ginebra quedó destrozado por un incendio, causado accidentalmente por una falla en una prueba para un efecto de pirotecnia previsto para una representación de la Valquiria. Reabrió en 1962, tras 11 años de obras.
2. Castillo de Windsor
En noviembre de 1992, la pare nordeste del castillo de Windsor –residencia real al oeste de Londres–, quedó destrozada. El incendio empezó en la capilla propagándose a pocos metros de los apartamentos privados de la reina.
Cinco años después y luego de las obras de restauración, el castillo se reabrió al público.
3. Fenice de Venecia
Inaugurado en 1792, este teatro era uno de los más prestigiosos del mundo, En 1996, la ópera de Venecia, la Fenice, quedó totalmente destruida por un incendio provocado por dos electricistas para evitar pagar las penalidades por el retraso de las obras. Volvió a abrir sus puertas al público en 2004.
4. Catedral San Juan Bautista y el Palacio Real de Turín
En 1997 fueron devastados por un incendio, en el que un bombero consiguió salvar el Santo Sudario tras romper con un martillo el cristal antibalas que protegía las telas que –según la tradición– envolvió el cuerpo de Cristo tras su crucifixión.
5. Museo Nacional de Río de Janeiro
Era considerado como el mayor museo de historia natural y antropología de América Latina con más de 20 millones de piezas. La noche del 2 de septiembre de 2018 quedó reducido a cenizas por un incendio causado por un cortocircuito en un aparato de aire acondicionado.