Por primera vez desde la crisis financiera de 2008, los tipos de interés hipotecarios han rebasado el 6% en Estados Unidos, además de darse un pinchazo a la burbuja inmobiliaria que estaba levantada sobre hipotecas basura y otros productos financieros tóxicos, señalan el gigante financiero Freddie Mac y la Asociación de Banqueros Hipotecarios del país.
Dicho incremento de los tipos hipotecarios se debió a la cifra de inflación del mes de agosto, que resultó peor de lo que se esperaba, y que además, van por delante de los tipos oficiales que fija la Reserva Federal y que se sitúan en un rango del 2.25 al 2.50%. En los últimos 12 meses, los tipos hipotecarios de los préstamos a 30 años se han duplicado bastante, ralentizando un poco el mercado inmobiliario.
“A pesar de que el incremento de los tipos seguirá frenando la demanda y presionando a la baja los precios de la vivienda, el inventario de viviendas a la venta continúa siendo insuficiente. Lo cual indica que, si bien es probable que siga cayendo el precio de la vivienda, no debería ser tan grande”, dijo Freddie Mac, que sitúa esos tipos en 6.02 por ciento.
La inflación en la unión americana se mantiene cerca de los niveles más altos de los últimos 40 años, de ahí que la Reserva Federal endurezca su política monetaria para tratar de controlarla, por lo que esos tipos de interés tan elevados descuentan un endurecimiento adicional.
La reunión de política monetaria del banco central se llevará a cabo el 21 de septiembre. Los inversionistas dan por descontada como mínimo la tercera alza consecutiva de tipos de 0.75 puntos y algunos temen que la subida pueda ser aún mayor, de un punto de una sola vez. La FED no aumentaba los tipos de golpe 0.75 puntos desde hace casi 30 años y no los ha subido un punto desde 1981, con Paul Volcker como presidente.
La previsión de incrementos de los tipos se ha trasladado ya a los préstamos a tipo fijo a largo plazo, como es el caso de los hipotecarios, situación que está impactando al mercado inmobiliario.
“El aumento de los tipos de interés hipotecarios ha reducido la actividad de refinanciación en más de un 80% con respecto al año pasado y ha contribuido a que un mayor número de compradores de vivienda se mantenga al margen”, expresó Joel Kan, responsable de análisis y previsiones de la asociación.
Indirectamente, la FED está logrando en parte su propósito de enfriar la economía. El incremento de tipos de las hipotecas sí contribuye, por lo menos en el riesgo de que se forme una nueva burbuja inmobiliaria en un mercado que estaba sobrecalentado por la escasa oferta y las bajas tasas. Por el momento, las difíciles condiciones monetarias se han notado más en una reducción de la actividad que de los precios.
También, el encarecimiento de los préstamos favorece que las familias se decidan más por alquilar que por comprar; lo que ayuda a enfriar la demanda y con ello le quita presión a la inflación, de acuerdo con una publicación de elpais.com.