La tendencia positiva de 2014 podría superarse en 2015.
El mercado inmobiliario muestra signos positivos y los analistas vaticinan su reposicionamiento como una de las industrias con mayor aportación al Producto Interno Bruto (PIB).
Al tercer trimestre de 2014, además de aumentar su competitividad y rentabilidad, el mercado inmobiliario mexicano presentó transacciones por 700,000 millones de pesos (mdp) lo cual generó entre 14 y 40 mpd en comisiones para sus vendedores; estas cifras son signos de la recuperación que está experimentando el sector dentro del territorio nacional.
De acuerdo con datos proporcionados por la empresa especializada en consultoría inmobiliaria Softec, la cartera hipotecaria durante el 2000 ascendió a 65,000 mdp y se espera que para el 2030 este número aumente a 1.24 mdp.
La importancia de identificar la diversidad de factores que afectan a la industria inmobiliaria es vital, ya que de ello dependerá la aceleración o desaceleración de la misma; así, bajo un análisis de lo que fue y lo que vendrá, las expectativas de recuperación son bastante favorables ya que la contribución a que esto ocurra se ha dado, principalmente, desde tres vertientes: los motores económicos, el aumento de la manufactura y la exportación, y el crecimiento de la clase media.
Estos se corroboran con los reportes que México arroja en cuanto al comercio internacional, como las exportaciones de manufacturas al extranjero, que en su conjunto, representan el 60% de las generadas en América Latina, lo cual impacta en un 20% al PIB del país.
Los motores que aceleran al sector inmobiliario
Cada metro cuadrado construido se interpreta de manera precisa, de acuerdo con su uso, en mayor empleo, más inversión o aumento en la demanda de vivienda; es decir, incremento en el poder adquisitivo. Sin embargo, esto no es cuestión de suerte o una situación arbitraria, sino consecuencia de las causas y efectos de la situación económica y social que se vive en los tiempos que corren.
El repunte de las inmobiliarias, entonces, se debe a que hay áreas de oportunidad que se han reconocido y, sobre todo, que se están aprovechando.
En este sentido, un caso concreto es la región del Bajío en la cual diversas industrias del sector aeroespacial y automotriz han invertido, demandando amplios espacios para establecer sus plantas y parques industriales; así como la demanda de infraestructura y desarrollo de vivienda debido a la reubicación de personas que estos sectores generan en inversión, lo que a su vez genera que las vivienderas y constructoras también aprovechen la oportunidad.
Entre las entidades que más han favorecido al crecimiento en esta región están Querétaro y San Luis Potosí, debido a la diversificación tanto de oferta como de demanda, con respecto a los comportamientos anteriores que se concentraban, principalmente en el centro y norte de nuestro país.
Asimismo está el caso de la nueva planta de Audi en el estado de Puebla y Parque Industrial Finsa Puebla II, que será vecino de la armadora automotriz, donde se instalarán 40 autopartistas para proveer just in time a la firma alemana. Para ello, se desarrolla un asentamiento urbano que ocupará los municipios de San José Chiapa, Nopalucan y Lara Grajale y del cual se proyecta que en 15 años alcance los 200,000 habitantes.
Esta nueva urbe comprenderá un territorio de 600 hectáreas, adicionales a las 400 que tiene Audi y las 90 del Parque Finsa.
Es así como la cadena de impacto va creando eco en otros sectores, industrias y economías.
En cuanto al caso particular de las oficinas, los metros cuadrados que representan este tipo de inmuebles llegan casi al 50% en las principales ciudades, con respecto al 10% que se registró en 2007.
Asimismo, los precios de estos inmuebles son altamente competitivos dentro del mercado mundial, un ejemplo es el precio del metro cuadrado en la Ciudad de México, que se encuentra 60% por debajo del que se oferta en ciudades como Hong Kong, Shanghái, Buenos Aires o Sao Paulo, además de ser la metrópoli con la mayor oferta de oficinas calificadas, con respecto a otras que se asemejan a ella.
El Infonavit y las opciones de inversión en bienes raíces
Con el segundo crédito, que actualmente ofrece el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), se ha incentivado la demanda de vivienda y con ello tanto el sector de la construcción e inmobiliario como el turístico se ven beneficiados, principalmente, por tres razones:
1. El crédito es utilizado para ampliación o remodelación de la vivienda donde habita el derechohabiente.
2. Se usa para comprar una segunda propiedad de mayor costo o comodidades para rentar la primera.
3. Con él se adquiere una vivienda para vacacionar.
En este sentido, resulta, relevante considerar que las ciudades en las que se prevé mayor crecimiento para 2025 son Monterrey, Guadalajara, Puebla, Tijuana, y el Distrito Federal (zona metropolitana).
Con respecto a lo anterior, de 2008 a 2013 el mercado de residencia popular y tradicional fueron los que avanzaron más con respecto a las metas propuestas en este último año por el Infonavit, mientras que la vivienda residencial y media no las alcanzaron.
El turismo y el desarrollo inmobiliario
El sector turístico también se encuentra en recuperación y al tercer trimestre de 2014, diversos destinos reportaron cifras históricas con respecto a las entradas de divisas, número de visitantes o derrama que han obtenido por actividades que refieren al giro. La mayor parte del turismo en la república mexicana es local, aunque los arribos internacionales presentaron un repunte importante; ello también impactó en la venta de vivienda vacacional, la cual reporta niveles cercanos a los existentes previos a la crisis de 2008.
La zona metropolitana del Valle de México
Conforme a las tendencias de crecimiento de la zona metropolitana del Valle de México (ZMVM), se estima que el ingreso familiar crecerá de 10,000 a 14,000 mensuales; con base en lo anterior, para el 2018 esta área generará una demanda de al menos 937,000 viviendas, debido a la formación de nuevos hogares; de estas 429,000 se solicitarán dentro del DF y se concentrará en un rango de precios que va de los 600,000 pesos a los tres millones de pesos.
La ZMVM tiene un parque de 6.1 millones de viviendas de las cuales 16% son verticales, la preferencia en este tipo de construcciones va a la alza, especialmente, porque la plusvalía de los terrenos va en crecimiento y la disponibilidad de los mismos se ha reducido por el aumento en la concentración de la población que se ubica en esta zona del centro de México. Así, podemos notar que las áreas de oportunidad varían de acuerdo a las necesidades específicas de cada geografía y target al que se dirija la venta o inversión.
Texto:Softec
Foto: QUERETARO GOB, FINSA, CENTRAL PAYK, ORANGE, PHOTOBUKET, TINPYC