Actualmente, México está viviendo un momento muy peculiar y significativo. Este no es un fenómeno fortuito, es el resultado de 30 a 35 años de esfuerzos continuos para construir un andamiaje específico que ha abierto el país al mundo.
México ha avanzado significativamente en el largo plazo hacia una estabilidad macroeconómica y financiera robusta, y posee características estructurales que auguran un crecimiento sostenido superior al que hemos alcanzado hasta el momento.
Promover el comercio e inversiones entre México y los Emiratos Árabes Unidos (EAU) es la prioridad de la embajada de nuestro país en aquella nación, destacando a México como una alternativa de inversión productiva atractiva para el nearshoring.
México se ha consolidado como un destino atractivo y confiable para la inversión productiva, y así lo reconocen los empresarios europeos. Consideran que México se destaca por su estabilidad macroeconómica, caracterizada por un manejo prudente de las finanzas públicas y una política monetaria disciplinada.
México se encuentra en una coyuntura histórica que le permite consolidarse como un actor clave en la reconfiguración del comercio internacional. El país está bien posicionado para aprovechar las oportunidades del nearshoring, friendshoring y reshoring.