Además de su clima, su estratégica ubicación en el centro del país, contando con excelentes vías de comunicación, el ser una ciudad con una belleza arquitectónica excepcional que cuenta con un Centro Histórico en perfecto estado de conservación, y el haber recibido el nombramiento de Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Está lleno de tranquilidad, historia, cultura, romance y naturaleza hermosa. Las ruinas de las minas son atractivas, las artesanías de instrumentos prehispánicos, y las galerías de arte y fotografía.
San Miguel de Allende se ha convertido en un destino turístico inmobiliario de enorme atractivo. Durante mucho tiempo, el mercado inmobiliario estuvo orientado fundamentalmente a extranjeros, pero en los últimos años ha comenzado finalmente a encontrar en el mercado nacional un gran potencial de desarrollo.
El encantador paisaje urbano, la fascinante arquitectura colonial y la impecable labor artesanal. La utilización de habilidades heredadas de generación en generación, las técnicas para trabajar la piedra, el yeso, la madera y la cerámica, los maestros artesanos de San Miguel son el enlace de garantía para lograr la conexión entre el histórico San Miguel del ayer y el vibrante San Miguel de hoy.
Su magia que enamora a todo aquel que lo visita, su cosmopolita vida nocturna, su contenido cultural en casi todas sus expresiones, su gastronomía sin parangón, y la mezcla cultural que la hace tan interesante y misteriosa.