El Transístmico no solo es un proyecto icónico por lo que representa en sí mismo; "es un logro después de 100 años; es histórico, simbólico, pero también marca un parteaguas en lo que pueden llegar a ser las cadenas de suministro y el comercio”, explica la también Coordinadora de Desarrollo Económico Regional y Relocalización en el ejercicio Diálogos por la Transformación, Altagracia Gómez Sierra, en entrevista con Real Estate Market & Lifestyle.
Y continúa, “puede conectar no solo el comercio entre dos puertos muy importantes en México –Salina Cruz y Coatzacoalcos–, puede conectar el comercio del mundo, lo que llega de países asiáticos y puede internarlos a la costa este de Estados Unidos, y es una forma distinta de concebir la relación de México con el mundo; si pensamos que el Golfo del país no solo está conectado con Centroamérica, que es una conexión importante, pero también es frontera con Estados Unidos que es la región económica en donde estamos verticalmente integrados”.
Abogada de profesión, Altagracia es presidenta de Promotora Empresarial de Occidente, uno de los conglomerados industriales y financieros más importantes del país que participa en sectores como el alimentario, automotriz, transporte público, desarrollo inmobiliario, almacenes generales de depósito y logística, entre otros rubros, que representan 20 mil empleos directos y un sinnúmero de indirectos por las cadenas de valor que representan.
Altagracia Gómez Sierra, presidenta de Promotora Empresarial de Occidente.
Gisselle Morán (GM): ¿Qué opinas del Transístmico como proyecto de las cuatro fronteras?
Altagracia Gómez (AG): Es un parteaguas, no solo para que lo comparen con el proyecto del Canal de Panamá, es lo que puede generar en sí mismo. Tenemos todo para que esos nueve Polos de Desarrollo funcionen; la realidad es que depende de nosotros planear adecuadamente desde temas de recursos naturales, ordenamiento territorial, vivienda y servicio para los colaboradores como escuela, salud, etcétera, pero también conexión con la academia para que haya mano de obra calificada y que funcione a la primera.
GM: ¿Para la siguiente administración gubernamental, el Transístmico sería uno de los proyectos más importantes para seguir invirtiendo?
AG: Considero que todos los proyectos de infraestructura tienen ciclos de largo plazo y en este sentido, desde luego, se continuará no solo apoyando el Transístmico decididamente, sino replicando el modelo de corredores industriales que conviene al país. El establecimiento de vocaciones regionales, como nosotros le llamamos, es algo indispensable para que se puedan generar economías de escala, que puedan generar las grandes obras de infraestructura para que generen círculos virtuosos y que generen lo que al final queremos, que son ecosistemas de inversión con cadenas de suministro, proveedurías locales, que requieren precisamente estos proyectos detonar.
GM: La prosperidad compartida…
AG: La prosperidad compartida es precisamente el modelo que se debe mantener en el Transístmico y replicar en el resto del país.
El tren transístmico recorre 303 kilómetros.
GM: ¿Se requiere hacer toda la infraestructura complementaria, ampliar los puertos, generar más y mejores aeropuertos, carreteras, etcétera?
AG: Desde luego, creo que si nosotros vemos al país en el mapa y observamos los productos y los servicios que han florecido, podemos ver que se han dado en corredores industriales. Por ejemplo, en el Bajío está el automotriz; el corredor del Norte con manufactura; los que están pegados a la frontera, el corredor que está en Ramos Arizpe, en Saltillo; en Monterrey, en Nuevo León, donde están sobre todo los de autopartes o autotransportes, son el número uno en exportación de tráileres.
Por otra parte, el corredor que se está haciendo en Dos Bocas, que va hacia Chontal, en el Sureste del país. Hay corredores que se hicieron naturalmente, pero la mayoría de estos se hicieron con planeación, con incentivos sectoriales y la idea es que lo que funciona se replique en otras partes. Por qué no pensar en conectar Sonora y Sinaloa, por ejemplo. Por qué no pensar en conectar algunos corredores cerca de la frontera, que no solo sea en Tijuana; qué se puede hacer en Mexicali, hay muchas ciudades que podemos unir en vocación.
La meta del CIIT es mover 1 millón 400 mil contenedores.
GM: Con la experiencia que tienes a través de Minsa, ¿cuáles consideras que serían unas de las principales vocaciones del Corredor Transístmico?
AG: Hay muchas opiniones al respecto. Lo primero que diría es que la agroindustria y la agricultura son un sector prioritario para México y el mundo, en temas de la seguridad alimentaria, como derecho humano, pero también el tema de industria alimenticia que creció incluso en la pandemia; cuando todo decreció al 10%, la industria alimentaria creció al 8%. Culturalmente, nosotros tenemos la frase: “sin maíz no hay país”; somos la cultura mesoamericana del maíz, y eso es algo que no podemos perder, la vocación específica del Istmo o del Transístmico, pues es muy variada y hay unas zonas que decididamente son para agricultura, para distintos cultivos. Veracruz tiene una zona de muy buen cultivo de maíz, por ejemplo, y también de algunos que son criollos o biodiversos; no solo la semilla híbrida que se da en Sinaloa o en otras partes de México, pero desde luego que hay vocaciones específicas locales..
Agroindustria y agricultura en México.
GM: ¿Cómo empresaria, cuáles serían los factores y requerimientos que considerarías para montar una planta en el Corredor Transístmico?
AG: Es una pregunta un poco compleja, porque tendríamos que preguntar de qué es la planta. No es lo mismo, por ejemplo, montar una planta de Dina en asociación con algún socio chino. Desde luego nos pondríamos en un puerto cerca de donde hay importaciones con China, e ir subiendo el contenido nacional que eso es algo que nos importa muchísimo, que dentro del Transístmico haya contenido nacional, porque no solo se trata de captar valor, se trata de crearlo.
Para el caso de Minsa, por lo que yo decía de Veracruz, sería del otro lado, pues tanto el maíz que se cultiva en Veracruz es bueno, como si yo tuviera que importar maíz de Estados Unidos, es bastante mejor el Golfo, con algún puerto con conexiones a Asia, primordialmente, y la exportación para Chiapas, y para Estados Unidos también se daría por Veracruz. Si tuviera que extenderme a una planta de plástico termoformado para automotriz, desde luego es mejor el Golfo, por ahí salen en la mayoría de los coches.
Estos son proyectos de gran calado, de gran extensión y no podemos apresurarlos. Desde que se anuncia la inversión hasta que se pone un pie en la planta, son al menos tres-cuatro años más allá de todo lo que eso involucra. No arrancas al 100%; entonces, yo te diría, creo que para todos debe ser muy atractivo al menos el análisis. Son nueve polos y ya hay cinco colocados al día de hoy y quedan cinco. Yo les diría, no porque no tengan puertos no son atractivos, están muy cerca de la mayor zona de consumo de América Latina: la Ciudad de México, que es el centro del país. En el Bajío, creo que ahí lo que falta es que cuaje la demás infraestructura y yo creo que en un plazo corto estará concluido eso y estará funcionando al 100 por ciento.
Crecimiento de la industria alimentaria.
GM: ¿A qué te refieres a que cuaje la demás infraestructura?
AG: Libramientos carreteros, energía, inversiones, no solo en generación sino en líneas de transmisión y agua, la última milla que debe ser un compromiso tanto de empresarios como del gobierno y se está trabajando para que así lo sea.
GM: ¿Qué se requiere para que lleguen las empresas y generen todo?
AG: Una empresa tractora es igual o más fuerte que una política pública y en ese sentido, no hay mejor cosa que en el ejemplo: el primero que llegue se empieza a instalar, es lo que va a detonar el ecosistema propio y también la urgencia de generar está última milla de la que hablamos.
GM: Con el bono demográfico, mano de obra calificada, las universidades, ¿estamos listos para el nearshoring?
AG: Yo creo que estamos listos, y estamos preparándonos para estar todavía mejor. Preparados, porque estar listo y estar preparado no necesariamente implica lo mismo, queremos que llegue la inversión con planeación. Creo que México lo tiene todo. Cuando me han preguntado que cómo le va a México, les digo que es un paraíso para la persona que vive aquí, es un paraíso para la persona que vacaciona, pero también para la persona que invierte aquí. Difícilmente encuentras otras condiciones como las que tiene México en el mundo, y en ese sentido, creo que todas deben de venir, considerar la sustitución de importaciones. Es la mejor posibilidad que tiene México de romper con la reproducción de la pobreza y desigualdad, y creo que el liderazgo que tienen tanto empresarios como políticos va a ser todo lo que tiene que hacerse para precisamente, no dejar ir esta oportunidad y consolidarse no solo como líder a nivel regional, sino a nivel mundial. Es una nueva forma de globalización, es una nueva forma de capitalismo, y en ella, México puede ser líder.
En México existen 149 mil ingenieros.
GM: Estás en muchos consejos de Cámaras, representas a muchos sectores, ¿cuál es tu sentir sobre el momento que está viviendo México económica y geopolíticamente?
AG: Creo que es un momento único para México, enese sentido yo creo que México está en boca de todos. México está de moda y lo que tenemos que hacer es no solo ponerlo de moda con los extranjeros, incentivando la Inversión Extranjera Directa, también la mexicana y era un poco lo que yo decía: sí, hay que crear condiciones para que vengan de fuera. Pero también hay que crear y concentrarnos en incluir a los que nunca hemos incluido y pueden serlo. Hablabas de talento y de la mano de obra calificada, somos el país de la OCDE que produce más ingenieros. Tenemos 149 mil ingenieros al año que egresan de escuelas públicas y más de 400 mil jóvenes egresan de carreras. Tenemos el doble de ingenieros que Brasil al año y vaya, en Estados Unidos hay más ingenieros, pero no per cápita, porque hay más porque son más; nuestro bono demográfico es de 19 años. Somos la potencia, tanto en el sector productivo como en el sector consumo, o sea, las compañías tienen que estar aquí por las dos cosas, porque somos un mercado muy importante, no solo una industria importante.
GM: ¿Cuál sería tu mejor sueño, que dijeras: ‘eso es lo que quiero para México’?
AG: Creo que si trabajamos en los pilares para que exista un México que genere prosperidad, que sea un México que dé seguridad en todas las secciones: jurídica, pública, social. Que vayamos a la formalización, seguridad energética, seguridad alimentaria y que genere movilidad. El tema de movilidad urbana es algo que tenemos que resolver sí o sí, porque eso es el primer impacto en el bienestar de las personas, pero también el tema de movilidad geográfica que es la migración que se da del campo a las ciudades y de sur a norte a nivel mundo, y la más importante que es la movilidad social, que cómo naces, no determina cómo te vas a morir. Que haya oportunidades, con escuelas, trabajo, profesión, oficio o empresas puedas salir adelante, y creo que es un México para el que estamos trabajando, que es un México de esperanza, un México mucho más fuerte.
Más de 400 mil jóvenes egresan de carreras en el país.
GM: Desde tu punto de vista, ¿consideras que fue un acierto el que se hiciera el Corredor Interoceánico junto con el Tren Maya, el aeropuerto y las obras?
AG: Yo creo que siempre es buen momento para hacer obras icónicas, simbólicas. Considero que cuando tienes claros tus principios es más fácil conocer cuáles deben ser los fines y en ese sentido, creo que son obras distintas.
El AlFA era un símbolo de que las cosas no se podían seguir haciendo como se venían haciendo; el tema del Tren Maya era una redención social, que históricamente tenemos una deuda con el sur, que no lo volteábamos a ver, y que en este sexenio crecieron a doble dígito respecto al resto de los estados, y ahí la obligación es cómo hacemos para que después de la obra se sostenga; y el Tren Transístmico, que es un poquito una combinación de las dos: lo simbólico del sur, lo simbólico de que sí se puede sacar una obra bien hecha, con proveedores locales, etcétera, pero le aúna otra capa, otro capítulo que es y también puede ser competitiva.
No solo es un tema social, es un tema que también puede traer beneficios económicos y quese puede hacer cuidando el medio ambiente, porque ahí se va a desatar una industria enorme; para las eólicas, una industria enorme, se acaba de anunciar una planta de hidrógeno verde va a dar pie a una generación de industrias y de economía circulares únicas.
GM: ¿Qué más te gustaría agregar, Altagracia?
AG: Diría que la continuación de estos proyectos es vital en México. Que se van a replicar y que la mayoría de los empresarios que participen serán bien compensados. Ojo, no por el gobierno, por el ecosistema que se va a generar y en este sentido, creo que todos pueden tener la tranquilidad que los proyectos o las inversiones que se harán a futuro se realizarán con la adecuada planeación, de manera rentable y con toda responsabilidad.
GM: ¿Cómo decirle al mundo que México es el lugar para invertir?
AG: Lo primero que diré es que somos competitivos, que también somos confiables, que eso es algo de lo mucho en lo que se basa el nearshoring y algo que no se dice de frente es la confianza, que somos un país con instituciones, que somos un país que celebra los mismos valores democráticos, que es un país que geopolíticamente está más cercano a ti y no solo en localización, que no te va a quedar mal. Y la última, es que somos convenientes, esa es la verdad; para hacer cualquier trato de negocios, uno busca la conveniencia de ambas partes y ahorita estamos en una posición donde tenemos algo que ofrecer y entonces eso lo hace muy conveniente para todos.
Agroindustria en México.
Diversificación empresarial
Promotora Empresarial de Occidente es un grupo industrial y financiero que participa en el sector primario, secundario y terciario, incluidos algunos de los desarrollos inmobiliarios más icónicos de América Latina, entre ellos Puerta de Hierro, considerado uno de los de mayor plusvalía de México y de los top 5 en América Latina. A la par han construido 180 desarrollos inmobiliarios en el país, desde vivienda de interés social hasta residencial turístico.
También forman parte del grupo Minsa, una de las principales productoras de harina de maíz para tortilla; Almer, el almacén general de depósito más grande en México; DINA, la única marca nacional de autobuses urbanos y suburbanos con tres plantas de plástico termoformado de uso automotriz con clientes como Tesla, Audi, Volkswagen, y Mercader Financial.
Coordinadora de la mesa en Diálogos por la Transformación
Atendiendo al llamado de la doctora Claudia Sheinbaum para coordinar la mesa en Diálogos por la Transformación que implica la planeación y el desarrollo económico regional y la relocalización, Altagracia Gómez recordó que las empresas de Promotora Empresarial de Occidente que ella dirige, nacieron con una visión y una ambición social, con misiones específicas de formalización de apoyo a Pymes o al autoempleo, e incluso para la adquisición de su primera casa etcétera y ello la promovió a unirse a los Diálogos.
¿En qué consiste esta planeación?Son diez principios o un poco menos, que consisten básicamente en generar prosperidad, crecimiento económico, desarrollo del PIB; estas métricas macroeconómicas que a todos ayudan como el empleo formal, pero eso tiene que redundar en promover, proteger, respetar y garantizar los derechos tanto civiles y políticos que son libertades como las económicas, sociales y culturales que son vivienda, salud, derecho al agua, internet, educación.
El segundo principio es la economía mixta, que es la rectoría del Estado con participación decidida de los privados en coordinación y cero corrupción. El tercero es planeación, cómo hacemos para que haya planeación, para que la inversión se haga sin improvisación, que es algo que creo que es importante para la empresa pública como para la privada. El cuarto es innovación, es otro concepto en el que creo que todos estamos de acuerdo que tenemos que pasar de industrias de menos valor agregado a pasar a industrias de más valor agregado y eso es algo que decididamente puede marcar la diferencia en la pobreza en México en la desigualdad de México y también en el bienestar de México.
Y la otra es inclusión, cómo incluimos a los que nunca incluimos. Cómo incluimos a ese mercado que financieramente nunca ha estado con acceso a capital o a crédito; cómo incluimos a las mujeres, cómo incluimos a los jóvenes y en este sentido hay proyectos en Chiapas y Oaxaca. Y el último pilar es la sostenibilidad, cómo hacemos para que cuando hagamos ese análisis holístico y con los proyectos de inversión se considere la rentabilidad de la compañía, pero también de los colaboradores y la comunidad en donde se va a establecer esa compañía. Se busca que los proyectos sean rentables económica, social y medioambientalmente.
Texto:Gisselle Morán
Foto: MARIO RAMÍREZ / PATTANAPHONG19 / MAHARUN NESSA / COMUNILOG / ABRAHAM CISNEROS / FREEPIK / OKAN EKINCI