Las Fibras compran inmuebles construidos o en desarrollo, con lo que los propietarios hacen líquidas sus propiedades, de ahí su acelerado crecimiento. El fideicomiso tiene que invertir por lo menos 70% de sus activos en bienes inmuebles destinados al arrendamiento y distribuir 95% de su resultado fiscal anual entre los tenedores de los certificados bursátiles por lo menos una vez al año. Otra de las razones que favorece el crecimiento de estos instrumentos de inversión en México, son los precios de los inmuebles y servicios asociados, pues son bajos con respecto a otros países.

Augusto Arellano, senior managing director de Evercore Partners, firma estructuradora de Fibra Uno, Fibra Hotel y Fibra Danhos, señaló en conferencia de prensa que "la mayoría del crecimiento de inmuebles propiedad de Fibras es resultado de la integración de activos existentes a estos; no de la inversión directa en el desarrollo de nuevos. Esta actividad de adquisiciones ha sido la forma más recurrente en la que la mayor parte de las Fibras, la más importante por supuesto en esta estrategia es Fibra Uno, han crecido y esto ha permitido que lo hagan a un ritmo muy acelerado. Es decir, se ha tratado de integrar activos existentes en un plazo muy corto".

En lo que va del año, las Fibras realizaron compras superiores a 1 millón de metros cuadrados, a lo que se sumaría el portafolio inicial de 2,800,000 m2 de naves industriales de Fibra Prologis.

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