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Durante mayo, la venta de viviendas en España registró una nueva caída, provocada en su mayoría por el alza de las tasas de interés; Madrid y las Islas son los mercados con mayor desplome.

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Por cuarto mes consecutivo, la venta de viviendas tuvo un descalabro, al registrar en mayo una caída de 6.4% respecto al año pasado, con 56 mil 137 viviendas vendidas y caídas importantes de las ventas en La Rioja (37%), Comunidad de Madrid (20,5%), Canarias (19,2%) o Baleares (17,1%).

Así lo revelaron datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística de España quien agregó que la cifra de viviendas vendidas solo fue superada una vez en los siete meses anteriores.

 

El mercado inmobiliario se ve afectado por el impacto del alza de los tipos de interés, y aunque en mayo se vendieron un 29% más viviendas que en abril, fue por el efecto de la Semana Santa.

 

"La subida de tipos ha elevado la cuota media de una hipoteca media un 46% si se contrata a tipo variable o un 28% si se contrata a tipo fijo”. Esto ha hecho que miles de compradores se hayan quedado fuera del mercado: un 17.8% de la demanda potencial en una ciudad como Barcelona, porque la cuota superaría el 35% de sus ingresos familiares, que es el límite de esfuerzo que aceptan los bancos para conceder una hipoteca”, explicó Paolo Boarni, consejero delegado de la red inmobiliaria Tecnocasa.

De acuerdo con Francisco Iñareta, portavoz del portal inmobiliario Idealista, "teniendo en cuenta que 2022 fue un año excepcional y de cifras récord deberíamos entender que, lejos de suponer una catástrofe, el enfriamiento del mercado responde a la realidad y la dimensión de nuestro mercado".

 

 

Mientras que Fotocasa prevé que en los próximos meses el mercado inmobiliario siga siendo un sector dinámico, aunque estima que el encarecimiento de los créditos ahuyentará a un volumen importante de compradores.

No obstante, en las comunidades autónomas del norte de España, la venta de viviendas aguanta especialmente bien, ya que las rentas familiares son bastante elevadas y los precios no se han disparado en los últimos años. Como se observó en el mes de mayo en Cantabria, donde las ventas se incrementaron 21.1%, Principado de Asturias (8.6%) y Castilla y León (7.9%) y Navarra (3.7%).

Se vendieron en Cataluña, en el quinto mes del año, 9 mil viviendas, un 5% menos que el año anterior, y en lo que va del 2023 se han alcanzado las 41 mil 384 transacciones, con una caída del 3.3%. Girona es la demarcación en la que el mercado se ha debilitado más, con una caída del 7.41% en mayo y la de Barcelona donde el descenso fue del 6.59%, mientras las ventas subieron tanto en Lleida (10%) como en Tarragona (0.5%).

 

En los cinco primeros meses del año, se vendieron 4.1% menos de viviendas con respecto al mismo periodo del 2022, esto es 261 mil 784 propiedades. A su vez, el mercado de obra nueva registró una caída del 2.4%, inferior al 3.3% que bajaron las ventas de viviendas de segunda mano.

 

Los datos muestran que “el enfriamiento del sector es una realidad evidente”, comentó Ferran Font, director de estudios del portal Pisos.com. Y cree que la evolución en los próximos meses “dependerá del desempeño de la inflación, el nivel del euríbor (que sigue encareciendo las hipotecas) y de la incertidumbre que genera el periodo electoral actual, así como de la implementación de la nueva Ley de Vivienda.

 

 

Finalmente, María Matos, directora de estudios de Fotocasa, expresó que mayo es el quinto mes de descenso de las ventas “luego de 21 meses consecutivos de aumentos muy abultados” por el boom que se vivió después de la pandemia. En su opinión, las ventas actuales deberían de compararse con el 2019, y son un 16.6% superiores; por lo que son niveles muy altos y datos muy positivos, que muestran la gran resiliencia del inmobiliario frente a las alteraciones económicas.

Con información de medios españoles