La integración de la tecnología en todo el ciclo de valor busca lograr los objetivos del negocio. Así, con la transformación digital inmoboliaria, la incorporación de herramientas tecnológicas, así como un cambio en la cultura organizacional y también un replanteamiento del modelo de negocio, son necesarias.

El uso de internet ha aumentado exponencialmente durante los últimos años, por ejemplo según datos de la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares de 2019, el 70.1% de la población de seis años o más en México es usuaria de Internet.

En los últimos 10 años ha habido una adopción masificada y acelerada de la disponibilidad de este servicio. En 10 años se pasó de tener 2 de cada 10 viviendas (21%) con servicio de internet en 2010 a 5 de cada 10 durante 2020. 

La tendencia hacia el uso de la tecnología se vio potenciada tras el confinamiento originado por la pandemia por covid-19, donde el sector tuvo que modificar su forma de comercialización para atender las necesidades de los usuarios.

Expertos de la plataforma inmobiliaria Lamudi detectaron que de marzo de 2018 a marzo de 2020 hubo un incremento de búsquedas de 36%, tomando en cuenta que el comportamiento de las búsquedas inmobiliarias es estacional (suele ser el mismo cada mes de cada año) de manera que se puede apreciar que durante el inicio de la cuarentena el aumento de tráfico en portales inmobiliarios ha sido significativo. 

Ahora, para empezar con la digitalización de los negocios inmobiliarios no se necesita de grandes cambios estructurales, ya que al principio es suficiente con tener una presencia de marca adecuada en la red, así como una gestión de las herramientas tecnológicas básicas como son el sitio web, redes sociales y el CRM inmobiliario, que es un software especializado para gestionar clientes o potenciales clientes.

Ante la economía globalizada y la tendencia tecnológica que se experimenta en el mundo, se debe tomar la decisión y actuar. Sin olvidar que en el centro de las estrategias debe estar el consumidor, quien es el que ha apalancado el cambio hacia lo digital. 

“La digitalización de los negocios inmobiliarios se puede realizar desde el modo en que se gestiona la relación con los clientes, hasta la elección de los inmuebles a comercializar, procurando que sigan la línea de las tecnologías verdes, recursos sostenibles, IoT o internet de las cosas; hay que tener en cuenta que más del 95% de las personas que buscan comprar o rentar inmuebles, inician su proceso de búsqueda en portales especializados”, destacó Daniel Narváez, Marketing VP de Lamudi.