Prueba de ello fue que los precios de las viviendas residenciales nuevas disminuyeron interanualmente en 11 de las 15 ciudades principales, considerados como los mercados con mayor dinamismo. Respecto al mes anterior, los precios de los nuevos inmuebles cayeron en siete de esas 15 ciudades, mientras que Beijing, Shanghai, Zhengzhou y Wuhan mantuvieron los precios de octubre.
El analista del BNE, Liu Jianwei, mencionó que los precios se mantuvieron estables en las principales ciudades por efecto de las políticas específicas de control. En las ciudades de primera categoría, donde los controles son más estrictos, los precios de las viviendas residenciales nuevas y de segunda mano bajaron un 0.1% y un 0.2% respecto al mes anterior, respectivamente.
El mercado inmobiliario en las ciudades de segundo y tercer nivel, por el contrario, está mostrando señales de aceleración, ya que los precios de la nueva vivienda residencial subieron de octubre a noviembre 0.5 y 0.4% respectivamente, según informó el organismo. Los datos prueban que las medidas de enfriamiento del gobierno para evitar burbujas de activos en el mercado inmobiliario están produciendo los resultados deseados.
Como se recordará, varios gobiernos locales aprobaron desde 2016 restricciones a la compra de viviendas y aumentaron el pago inicial mínimo requerido para las hipotecas.
Debido a los esfuerzos gubernamentales, tanto la inversión como las ventas en el sector inmobiliario del país se desaceleraron en los primeros 11 meses. Según los datos oficiales, la inversión inmobiliaria aumentó 7.5% interanual durante el periodo enero-noviembre, frente a 7.8% de los primeros diez meses.
Las ventas de propiedades en términos de superficie aumentaron 7.9% en los primeros 11 meses, desde el 8.2% en enero y octubre. Un informe de la Academia Nacional de Estrategia Económica predijo que el mercado inmobiliario del país debería permanecer estable el próximo año si no hubiera una maniobra importante de política.
Las autoridades chinas insistieron por su parte que las viviendas se construyen para vivir, no para especular, y se comprometieron a intensificar la reforma del sistema de vivienda y a fomentar un mecanismo de mercado a largo plazo. Se espera que la Conferencia Central de Trabajo Económico, que se inauguró recientemente para revisar el desempeño económico del país en 2017 y hacer planes para 2018, detalle la postura política futura para el mercado inmobiliario.