La única posibilidad de frenar el avance de la mancha urbana, es reconociendo la importancia de la figura del desarrollo regional del país, aseguró el secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), Jorge Carlos Ramírez Marín.

En un comunicado, el funcionario subrayó que la tarea fundamental de la dependencia a su cargo en esta materia, es habilitar nuevamente la Dirección General de Desarrollo Regional adscrita a la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda, a fin de que el desarrollo regional recupere un papel central en la planeación e incursión de políticas públicas del gobierno federal.

La SEDATU, indicó, está obligada a diseñar y gestionar políticas públicas, metodologías e instrumentos para el desarrollo regional, así como coordinarlos, darles seguimiento y evaluarlos, ya que incluso cuenta con la representación federal en los fideicomisos para este objetivo.

"Creemos que si los servicios, las oportunidades, los proyectos de inversión fueran comunes a regiones o a ciudades, no necesariamente tendrían que conurbarse, sino que al contrario, irían encontrando soluciones cada una dentro de su espacio", dijo.

Parte fundamental para detonar el desarrollo regional del país, señaló Ramírez Marín, consiste en activar los fideicomisos, ya que son la única parte visible de una política orientada al progreso.