GCC, la empresa cementera basada en Chihuahua, México, aseguró que el 25% de aranceles que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se propone imponer a productos importados desde el territorio mexicano, tendrán un marginal impacto.

Lo anterior debido a que el cemento no figura entre los productos sujetos a gravámenes, además, la cementera aseguró que solo el 10% del cemento que comercializa en Estados Unidos proviene de México, mientras que el resto es producido en sus plantas ubicadas en el estado de Texas, lo que reduce el impacto de las tarifas.

A pesar de las preocupaciones sobre posibles ajustes en los costos, GCC subraya que su estrategia ha sido mantener precios competitivos en el mercado estadunidense, donde las perspectivas de precios siguen siendo favorables.

De igual manera, la firma descartó que el presidente Trump pueda cancelar el arrendamiento de SunZia, un proyecto de energía eólica que desarrolla con respaldo del Inflation Reduction Act.

Ventas caen 1.3% durante el 4T24, pero GCC se mantiene fuerte

Según la empresa, los acuerdos financieros para el proyecto están completamente asegurados y no se prevén cambios en los planes actuales.

En cuanto a sus resultados financieros, la empresa destacó que las ventas en Estados Unidos, su mercado principal, aumentaron un 4.1% interanual, alcanzando los 246.9 millones de dólares, impulsadas por un alza en los precios del cemento y concreto.

No obstante, las ventas en México cayeron un 13.9%, reflejando una menor demanda de cemento y concreto, a pesar de un ajuste en los precios.

“Si bien observamos una leve disminución en los resultados de México, nuestra presencia en Estados Unidos sigue siendo fuerte, y mantenemos nuestra confianza en los pilares fundamentales de nuestro negocio”, afirmó Héctor Enrique Escalante, CEO de GCC, al destacar que más del 75% del EBITDA de la empresa proviene de su operación en el mercado estadunidense.