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La banca de desarrollo ha financiado los proyectos emblemáticos del gobierno, como el Tren Maya, el Tren México-Toluca y la refinería de Tula, destinando más de 100,000 millones de pesos.

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El director general del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), Jorge Mendoza, estimó que la inversión pública y privada en proyectos de infraestructura podría llegar a representar el 20% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional en el 2023.

Lo anterior, toda vez que actualmente representa el 18.6% de la economía mexicana. No obstante, su crecimiento dependerá de la viabilidad de los proyectos actuales y que no sean afectados por la volatilidad financiera actual y por las presiones inflacionarias.

 

“Esperamos que la inversión llegue a un total del 20% del PIB para el 2023 y que incluso se pueden superar con base al buen desempeño que estamos viendo en la economía mexicana”, proyectó el funcionario federal.

 

Entonces puntualizó que la inversión pública en México ronda entre un 2.0 y 3.0 por ciento. Por ello, considera que para el siguiente año se mantenga en la parte alta de dicho rango, dados los proyectos existentes.

“La inversión pública es la presupuestal, ya que existe más inversión que se hace a través de las empresas públicas, de descentralizadas, de empresas como Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) que no están dentro de este rubro y eso también se le suma a la inversión del sector privado”, dijo Jorge Mendoza.

Pero reiteró que siguen latentes algunos riesgos a nivel internacional, como la inflación que genera presiones en los insumos para la manufactura, para los servicios y para otras industrias. Además, el costo de financiamiento está aumentando, lo cual podría tener un impacto en la viabilidad de algunos proyectos de infraestructura como de otras materias. 

“Todo esto provoca retos hacia adelante; pero en México estamos viendo una recuperación sostenida”, expuso.

Jorge Mendoza también habló de los proyectos emblemáticos del gobierno que se han financiado a través de Banobras, tales como el Tren Maya, el Tren México-Toluca y la refinería de Tula, en donde han asignado préstamos por más de 100,000 millones de pesos, junto con el Fondo Nacional de Infraestructura.