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Con la intención de aumentar la capacidad operativa, construirán muelles y patios, adquirirán grúas de muelle, pórticos neumáticos y otros equipos.

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Contecon Manzanillo invertirá 230 millones de dólares (mdd) durante el 2022 para ampliar las instalaciones de la terminal de contenedores que opera en este puerto colimense.

La intención es aumentar en 300,000 contenedores, con lo cual su capacidad operativa pasará de 1.4 a 1.7 millones de TEU al año en la terminal ya saturada antes de la pandemia. 

Para ello, construirán muelles y patios, además adquirirán grúas de muelle, pórticos neumáticos, tractores portuarios y otros equipos. 

En este sentido, José Antonio Contreras, CEO de Contecon Manzanillo, dijo que la crisis en las cadenas de suministro agravó la presión que tenía el puerto. 

Sobre todo debido a la falta de capacidad para desahogar la mercancía que comenzó a llegar de manera abrupta desde el último trimestre de 2020, y que no han dado un respiro a las instalaciones. 

Añadió que las terminales se llenan cada vez más de contenedores, mientras que la aduana no está diseñada para trabajar 24 horas al día los siete días de la semana

“La aduana trabaja diez horas, pero nosotros queríamos trabajar las 24 horas para afrontar la situación”, señaló Antonio Contreras a Expansión. 

Además de esta inversión privada, Contecon Manzanillo espera que los 230 mdd complementen el monto del gobierno federal para diversos proyectos de inversión, por 310 millones de pesos (mdp) para 2022. 

Entre las obras en Colima se considera el mantenimiento de las escolleras en el canal de acceso del puerto Laguna de Cuyutlán, el dragado de mantenimiento en el Puerto Interior San Pedrito y laguna mencionada. 

El CEO añadió que el Puerto de Manzanillo debe mejorar los accesos y las vialidades, que no son adecuadas al volumen que actualmente asume la empresa. 

Además, con la saturación de los puertos y la escasez de contenedores, ven mayores costos en los fletes que las empresas pagan a las navieras. 

Pese a ello, existen otros costos operativos en los que las empresas incurren como consecuencia de la crisis en las cadenas de suministro, como en almacenaje y de transporte, que se disparó.