Este sistema de origen suizo permite conocer las distancias exactas del trazo con relación a edificios, obras inducidas y/o complejos habitacionales cercanos a la obra. En comparación con el método tradicional de planos, se pueden realizar levantamientos mucho más precisos y de una manera más ágil, además de visualizar el proyecto concluido en tercera dimensión.

Lo anterior lo dio a conocer el titular de la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse) de la Ciudad de México, Edgar Tungüí Rodríguez, durante su participación en la “Exporail 2017”, que se llevó a cabo en Santa Fe. “Hay cosas que al estar haciendo el proyecto no se notan, por ejemplo, interferencias con taludes, con construcciones o árboles y que el propio modelado en BIM nos ha ayudado a ir identificando para corregir temas de trazo, de corte de taludes, de reubicación de instalaciones”.

Destacó que la ventaja de usar tecnología virtual radica en que se puede conocer de antemano las condiciones de accesibilidad cuando hay escenarios complejos, pues en el trazo del tren se trabaja en área de taludes, zonas inestables y geometrías estrechas.

A través de mediciones láser se obtiene información tridimensional de las superficies o estructuras que se encuentran a lo largo de 17 kilómetros de trazo que corresponden a territorio capitalino.

Este método ha sido utilizado en construcciones a nivel mundial, como la Torre de Shanghai, la más alta en China, y en la ampliación del canal de Panamá, en Centroamérica.

Tungüí Rodríguez resaltó que el avance del tercer tramo del Tren Interurbano que corresponde al gobierno capitalino, implica tener listo 80% de la conformación de piezas prefabricadas (columnas, trabes y cabezales).

Finalmente destacó que las ampliaciones de la Línea 5 del Metrobús, la Línea 12 del Metro, la creación de la Línea 7 del Metrobús, el tercer tramo del Tren Interurbano y el programa de mantenimiento y rehabilitación integral del Circuito Interior, representan una inversión total multianual de 30,000 millones de pesos.