El holandés Hendrick Jonkers logró extender la vida del concreto a través de una bacteria capaz de producir piedra caliza de activación automática en el material de construcción; esto, de acuerdo con The Guardian.
El investigador se enfocó a encontrar una bacteria que pudiera sobrevivir al ser mezclada con el concreto, un ambiente extremadamente alcalino, y ser capaz de iniciar el proceso de sanación del concreto automáticamente tras activarse con agua.
La bacteria se puede aplicar en forma de spray en pequeñas grietas, en mortero para reparar un daño estructural mayor, y en concreto de autoreparación. Por ahora sólo puede reparar fracturas de hasta 0.8 milímetros de grosor, y su precio es alto. Un metro cúbico de concreto cuesta en promedio 70 libras esterlinas, mientras que un metro cúbico del concreto autorreparable tiene un precio de 100 libras, de acuerdo con The Guardian.
Con información de CNN.com.
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