El titular de la Sedatu dijo que el desarrollo urbano y la producción de vivienda van de la mano y ambos pueden corregirse con una correcta planeación de las ciudades. Destacó que el impacto económico de una reforma urbano integral podría generar un crecimiento mayor al 4% del Producto Interno Bruto (PIB).
De acuerdo con cifras del Centro Mario Molina, alrededor del 60% del suelo urbanizado es de origen irregular, por lo que hablar de una planeación no tiene que ver con un problema estético, sino con la forma en la que se distribuye el país y se generan oportunidades.
A través de un comunicado, indicó que investigaciones oficiales señalan que el 36% de los municipios urbanos cuenta con un instituto municipal de planeación y solamente el 10% tiene un Atlas de Riesgos.
Ramírez Marín comentó que el tema metropolitano forma parte del ordenamiento territorial, ya que 21 ciudades han crecido más de 20 veces en los últimos 15 años, lo cual implica que en las ciudades se concentre poco más del 50% de la población del país. Por ello, resaltó la necesidad de establecer un equilibrio para frenar el proceso de metropolización.