Así lo dejaron ver en las minutas de la reunión de la Junta de Gobierno, llevada a cabo el pasado 15 de diciembre, en donde se decidió, por mayoría, elevar la tasa objetivo a 5.50 por ciento.

La Junta alertó sobre la tendencia alcista en la inflación, la cual se agudizó y es más general, y por el incremento en las expectativas de precios; de la misma manera, advirtió el incremento en los riesgos para el mercado financiero local.

A través de un reporte, los analistas de BX+ indicaron que la mayoría de los miembros de la Junta comentaron que “la presión inflacionaria se agudizó y es más generalizada; un participante incluso señaló que es posible que no se haya visto el pico del alza en precios. También se discutió ampliamente el incremento en las expectativas de precios de corto y mediano plazo, tanto las obtenidas de encuestas como de mercados financieros”.

El reporte de la institución bursátil señaló que “para el incremento en el pronóstico de inflación, se consideraron factores como la depreciación cambiaria y la incierta duración de las obstrucciones en la oferta. Si bien la mayoría espera que la inflación vuelva a la meta en el horizonte, unos no descartaron que esto no se logre si surgen nuevos choques en los precios. La mayoría considera que los riesgos para la variable siguen sesgados al alza y varios opinaron que el aumento en precios ya no puede considerarse transitorio”.

Los analistas de BX+ consideran que para reforzar el anclaje en las expectativas y contribuir a que la inflación ceda, Banxico aplicaría al menos tres alzas de 25 puntos base en cada caso en la tasa objetivo en 2022.

Entre los factores que pueden impedir una corrección a la baja en la inflación, destacan más cuellos de botella en la producción, por el alza mundial en contagios; episodios de depreciación del peso ante una más rápida normalización monetaria en los EE.UU.; anclaje de las expectativas en un nivel más elevado; altos precios de bienes agropecuarios; y, ajustes al salario mínimo.

Sobre los mercados financieros la mayoría de los participantes de la Junta reconocieron que la volatilidad reciente de los mercados financieros nacionales obedeció tanto a factores internacionales, como a internos, entre ellos el cambio en la sucesión del gobernador al frente de Banxico.