A tres años de la muerte de Zaha Hadid, Patrik Schumacher, director de Zaha Hadid Architects, habló sobre el impacto que tuvo su fallecimiento en el estudio, cómo ha crecido, planes a futuro y reveló la posibilidad de que este año cambie el nombre de la firma de arquitectura asegurando que “necesitamos convertirnos en una marca creativa”.
Dijo que, pese a que el nuevo nombre no incluye ninguna de las siglas de Hadid, representa su “dirección y ambición creativas”. Afirmó, que desde el deceso de la arquitecta anglo-iraquí, no perdieron ni un solo cliente, sin embargo, “lo más difícil de reemplazar fue el estrellato de Zaha como ícono cultural”.
Con 57 años de edad, Schumacher estaba con ZH en Miami cuando ella murió inesperadamente de un ataque cardíaco el 31 de marzo de 2016 a los 56 años. En entrevista con Dezeen, Patrick aseguró que el deseo de Hadid era que algún día asumiera la dirección de ZHA, sin embargo, el proceso se ha complicado por una disputa legal en curso por su patrimonio que asciende de 70 millones de dólares, además de una polémica dentro de uno de sus discursos en el que dijo que la vivienda social debería ser desechada y el espacio público privatizado.