Tras un replanteamiento del diseño, se creó una propuesta con curvas complejas y una luz de 12 metros, el puente está siendo construido por el sofisticado robot 3D impreso de MX3D. Asimismo contará con una red de sensores será instalada en el puente para recopilar información estructural, tal como desplazamiento, vibración y tensión; además de factores medioambientales como temperatura y calidad del aire.
El puente no solo permitirá el paso de ciclistas y peatones, sino también será un laboratorio viviente, cuyo rendimiento será monitoreado y analizado por MX3D y un equipo de investigadores del The Alan Turing Institute.
Toda esta información será ingresada a un modelo 3D actualizado del puente, el cual permitirá a los diseñadores aprender sobre su rendimiento y redefinir sus diseños para futuras iteraciones, detalló Archdaily.