Conforme aumenta la adopción de tecnologías avanzadas como la Inteligencia Artificial (IA), surgen desafíos notables. Por un lado, estas tecnologías fortalecen los protocolos de seguridad y el análisis predictivo, ofreciendo una defensa más robusta contra los ciberataques. Sin embargo, también traen consigo nuevas vulnerabilidades que los ciberdelincuentes aprovechan para desarrollar estrategias de robo de información y hackeo más sofisticadas y automatizadas.
A medida que las empresas y las entidades públicas aumentan su dependencia de los procesos digitales, el peligro de sufrir un ataque se incrementa. Por este motivo, es fundamental dar prioridad a la protección de datos sensibles y de la infraestructura.
En México, el creciente uso de la tecnología lleva a una interconectividad constante y necesaria, haciendo más necesario contar con las mejores medidas de ciberseguridad a nivel personal, compañía o dependencias gubernamentales.
De acuerdo con el Informe de Seguridad Latam, “el mercado mexicano, es el segundo más expuesto a incidentes de ciberseguridad (17%) en América Latina. Tan solo, los ataques de ciberseguridad regionales han aumentado un 600% en los últimos 24 meses y México sufre un promedio de mil 600 de esos ataques por semana”, comentó Pierre Lambert, Co-fundador de Octapus.io.
Señalaron los expertos que, al igual que en la mayor parte del mundo, el mercado de ciberseguridad de México está en alza. La transformación digital generalizada de sectores, incluidos finanzas, atención médica, servicios gubernamentales y venta al por menor, está impulsando la demanda de soluciones defensivas más robustas.
La ciberseguridad enfrenta dos desafíos principales. Hay una falta generalizada de conciencia e implementación de buenas prácticas de ciber protección, tanto en el hogar como en el entorno corporativo. El 36% de los usuarios de internet en México aún no tienen protección antivirus básica. Y las limitaciones financieras, especialmente dentro de las Pymes y las instituciones públicas, obstaculizan la adopción de medidas robustas de ciberseguridad, resaltó Felipe Villaneda, Co-CEO de la empresa especializada en ciberseguridad, nube y cumplimiento.
"Tenemos que considerar que existe una brecha importante entre la demanda del mercado de ciberseguridad y el grupo de profesionales calificados disponibles. En México y en el mundo, hay una escasez de alrededor de 400 mil expertos en ciberseguridad”.
Gracias a que la tecnología de ciberseguridad está experimentando un rápido progreso en áreas como el análisis predictivo, la inteligencia de amenazas y la respuesta a incidentes, se alcanzan niveles de sofisticación cada vez mayores. El análisis predictivo se emplea para prever posibles amenazas mediante la detección de patrones y anomalías en conjuntos de datos extensos, lo que fortalece las defensas de forma anticipada.
Para los expertos, el rápido ritmo de cambio tecnológico y la creciente sofisticación de las amenazas cibernéticas demandan una fuerza laboral con habilidades avanzadas y actualizadas. Desafortunadamente, la falta de profesionales calificados en ciberseguridad deja a las organizaciones vulnerables. Esta brecha se ve exacerbada por la necesidad de una infraestructura de ciberseguridad y soberanía de datos más sólida.
A medida que México se encuentre en la encrucijada de la transformación digital, su mercado de ciberseguridad debe ofrecer un entorno seguro y fuerte propicio para el crecimiento. “La confluencia de una mayor adopción digital en varios sectores, como el comercio electrónico, la tecnología financiera y la atención médica, ha sentado las bases para un ecosistema de ciberseguridad floreciente”, puntualizan los expertos.