A partir del siglo I a.C., el blanco representó más para los romanos que un simple color, fue un símbolo transmisor de ideas a través de ornamentas construidas con mármol.
Es por ello que los expertos de pinturas KÖLOR de Sodimac comparten algunas de las virtudes de la aplicación del color blanco como renovador del hogar mediante las paredes, muebles y decoración cromática:
-Estilo clásico: En estilos como el neoclásico o el barroco, el color blanco se utiliza en molduras, cornisas y carpinterías para resaltar la arquitectura y realzar los detalles ornamentales. Además, en muebles tapizados y textiles. Esta elección evoca la elegancia de épocas pasadas y otorga una sensación de serenidad.
I-nteriores contemporáneos: En espacios minimalistas y de líneas limpias, se convierte en el lienzo perfecto para resaltar la simplicidad y la funcionalidad. Las paredes blancas actúan como telón de fondo para destacar piezas de mobiliario de diseño vanguardista y obras de arte. Y en ambientes de estilo nórdico, el blanco se utiliza para maximizar la entrada de luz natural.
-Versatilidad: Se adapta a una amplia gama de estilos decorativos y paletas de colores complementarios, y nunca pasa de moda, lo que convierte al color blanco en una elección segura para aquellos que buscan un diseño duradero.
-Iluminación: La luz natural permite crear un ambiente cálido y acogedor. Además, la iluminación artificial estratégicamente colocada puede acentuar los detalles arquitectónicos y resaltar los elementos decorativos en blanco.