La demanda de dispositivos médicos en México incrementó por la aparición del COVID-19, y actualmente el país es el octavo exportador a nivel mundial y el número uno en América Latina, con una tasa de crecimiento del 7 por ciento.
El valor de la producción de dispositivos médicos en México es de más de 15,220 millones de dólares y genera más de 130,000 empleos y representa el 0.3% del Producto Interno Bruto (PIB) total y 1.5 del PIB manufacturero.
No obstante, en México sigue siendo un reto prevenir y tratar las enfermedades crónicas, pues en conjunto con el nuevo Coronavirus, han avanzado de manera importante y representan más del 40% de las causas de muerte.
Según la Asociación Mexicana de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos (AMID), la demanda de estos dispositivos representó un desafío para los profesionales de la salud y las empresas proveedoras, sobre todo en temas de suministro, logística y capacitación.
Esto, porque la demanda sobrepasó por mucho la capacidad instalada y se demostró la gran necesidad de fortalecer la industria nacional en temas de manufactura, destacó Carlos Alejandro Salazar Gaytán, director general Medical Expo.
Antes del 2020 el sector había tenido un crecimiento de manera sostenida, y la aparición del COVID-19 aumentó la producción y demanda de los insumos, con altas demandas de equipos de protección, pruebas reactivas y productos asociados a la terapia respiratoria.
Salazar Gaytán dijo que la importancia de una mayor cultura de uso de dispositivos médicos preventivos, implementación de dispositivos médicos correctivos y su uso adecuado a través de entrenamientos y capacitaciones, es crucial para mejorar el porcentaje de mortalidad por enfermedades en México.