|  

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía, informó que en marzo las ventas al menudeo se contrajeron -1.3% en comparación con el mismo mes del año pasado.

Las ventas al menudeo presentaron en marzo los primeros efectos de la sana distancia, al registrar una contracción en términos anuales por primera vez en más de un año, además de mostrar cambios en los patrones de consumo.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI,  informó que en marzo las ventas al menudeo se contrajeron -1.3% en comparación con el mismo mes del año pasado.

Dicho reporte mostró un decremento en las ventas de productos considerados no esenciales y duraderos, mientras se incrementaron los que sí lo son. Un análisis de Banorte señaló que, “estos resultados comienzan a mostrar los efectos de cambios en el comportamiento de los consumidores ante el choque del COVID-19, con un deterioro en el consumo de bienes no esenciales y duraderos, tanto por el cierre de tiendas como por el aumento en la incertidumbre. Su desempeño empeoraría en los próximos meses, con más medidas para combatir el contagio y ante la acumulación del impacto de la debilidad económica sobre los ingresos de las familias”.

Agregaron que “el desempeño (de marzo) estuvo impactado por el choque de la pandemia de COVID-19, más que eliminando el impulso de un día laboral adicional en la comparación anual. No obstante, creemos que el dato fue mejor a lo esperado por nosotros considerando que la ‘Fase 2’ fue anunciada el 23 de marzo y la emergencia sanitaria fue declarada hasta el 30 del mes, a pesar de que algunos negocios empezaron a ser impactados desde mediados del periodo”.

Cifras oportunas muestran que las ventas caerán con más fuerza en abril. “Las ventas en mismas tiendas de la ANTAD disminuyeron 24.5% anual en términos reales. Hacia delante, esperamos una dinámica relativamente similar en mayo, con la posibilidad de que se extienda aún más de acuerdo con el plan para reabrir la economía”.

0 No me gusta0

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía, informó que en marzo las ventas al menudeo se contrajeron -1.3% en comparación con el mismo mes del año pasado.

Las ventas al menudeo presentaron en marzo los primeros efectos de la sana distancia, al registrar una contracción en términos anuales por primera vez en más de un año, además de mostrar cambios en los patrones de consumo.

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI,  informó que en marzo las ventas al menudeo se contrajeron -1.3% en comparación con el mismo mes del año pasado.

Dicho reporte mostró un decremento en las ventas de productos considerados no esenciales y duraderos, mientras se incrementaron los que sí lo son. Un análisis de Banorte señaló que, “estos resultados comienzan a mostrar los efectos de cambios en el comportamiento de los consumidores ante el choque del COVID-19, con un deterioro en el consumo de bienes no esenciales y duraderos, tanto por el cierre de tiendas como por el aumento en la incertidumbre. Su desempeño empeoraría en los próximos meses, con más medidas para combatir el contagio y ante la acumulación del impacto de la debilidad económica sobre los ingresos de las familias”.

Agregaron que “el desempeño (de marzo) estuvo impactado por el choque de la pandemia de COVID-19, más que eliminando el impulso de un día laboral adicional en la comparación anual. No obstante, creemos que el dato fue mejor a lo esperado por nosotros considerando que la ‘Fase 2’ fue anunciada el 23 de marzo y la emergencia sanitaria fue declarada hasta el 30 del mes, a pesar de que algunos negocios empezaron a ser impactados desde mediados del periodo”.

Cifras oportunas muestran que las ventas caerán con más fuerza en abril. “Las ventas en mismas tiendas de la ANTAD disminuyeron 24.5% anual en términos reales. Hacia delante, esperamos una dinámica relativamente similar en mayo, con la posibilidad de que se extienda aún más de acuerdo con el plan para reabrir la economía”.