El mercado de parques industriales lo vemos activo, con oportunidades, aunque no con el mismo ritmo de crecimiento de años anteriores. Hemos tomado una posición de cautela, en respuesta a un entorno económico complicado.
En 2018, aún con el periodo de elecciones, las bajas en las perspectivas de calificación para México y la incertidumbre que generó el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), vimos que el mercado no se detuvo, siguió activo y las empresas del sector industrial —sobre todo de Estados Unidos— continuaron con sus planes de inversión en nuestro país.
Será muy importante cuidar la imagen de México ante el mundo, para evitar generar una percepción de incertidumbre que pueda sin duda perjudicar al sector industrial, y por consecuencia, al sector inmobiliario. Sin embargo, confiamos en que el mercado reconoce la calidad del producto Hecho en México, la productividad y la excelente mano de obra calificada que nuestro país ofrece.
Desde la perspectiva del sector industrial, sí reconocemos la incertidumbre que se ha generado y su impacto en la demanda de espacios.
Por ejemplo, la situación laboral que se presentó en la frontera norte del país, desalienta la expansión de las que ya existen, así como la llegada de nuevas inversiones.
Por otro lado, también tenemos un sector automotriz que no se detiene. Vienen las aperturas de las plantas de Toyota y BMW, con un sector logístico en expansión. Vamos a enfocarnos en lo positivo y aprovechar estas oportunidades, dándoles confianza a los inversionistas.
En FINSA, continuamos con nuestra visión de crecimiento para este año. Tenemos ya ubicados terrenos para desarrollar nuevos parques, pero todo dependerá de cómo se desarrolle el entorno. En 2019, lo más probable es que lancemos una tercer Certificado de Capital de Desarrollo (CKD) para continuar con el programa de inversión.
Sergio Argüelles, CEO de Finsa.
Texto Sergio Argüelles
Foto: finsa
