Con el paso de los años, la cantidad de peregrinaciones organizadas a la Basílica de Guadalupe se incrementó de modo tal, que el espacio que circunda al complejo de templos de la Villa, resultaba cada vez más inadecuado para los más de 20 millones de fieles que lo visitan cada año. Con la finalidad de recuperar el espacio y de poder darles a los peregrinos un recibimiento adecuado, se impulsó un proyecto de remodelación del espacio junto a la Plaza de las Américas, por medio de la reordenación del comercio existente y de la dotación de los servicios que necesita el complejo mariano.
Antecedentes
Fue en el año 2001 cuando surgió una propuesta para crear una gran plaza que le diera más espacio al atrio de la Basílica, por medio de una explanada y un edificio que albergara las instalaciones tanto pastorales como de comercio. Dicho proyecto se comenzó a edificar en el año 2006, pero por distintas razones fue perdiendo fuerza y resultó irrealizable. De acuerdo con las declaraciones del Cardenal Norberto Rivera: “(Es) urgente para esta Arquidiócesis, para México, para los peregrinos de todo el mundo, tener un centro de evangelización, un centro en donde se conociera a través de los medios modernos el mensaje de María”.
El proyecto
En el año 2010, como respuesta al llamado que hiciera el cardenal Norberto Rivera Carrera, Arzobispo Primado de México, la Fundación Carlos Slim presentó un proyecto que aglutinó las voluntades del Gobierno del Distrito Federal, de la Iglesia Católica Mexicana y de la sociedad civil; dicho proyecto donado en su totalidad por la Fundación, fue diseñado por el arquitecto mexicano Fernando Romero, tomando en cuenta que el edificio de la nueva Basílica es emblemático y vertical; por esta razón se decidió resolver la nueva Plaza Mariana por medio de una arquitectura atemporal, discreta y funcional que contrastara con la Basílica, con el fin de apoyar a nivel de servicios a todo el conjunto.
Se desplanta sobre 29 mil 534.27 metros cuadrados de terreno ubicado entre las calles de Fray Juan de Zumárraga, 5 de Febrero, Iturbide y la Plaza de las Américas. Se trata de un complejo rectangular divido en cuatro cuadrantes por una cruz latina de cristal que fungirá como zona de tránsito y, en el centro del cuadrante inferior derecho, una imagen compuesta por más de 60 mil piezas de vitroblock de la Virgen de Guadalupe, que tendrá la doble función de ser vitral para el edificio interior (criptas) y de proyectar una imagen luminosa de la Guadalupana durante la noche, enmarcada por la misma cruz que también tendrá la misma doble función, como tragaluz y pantalla de luz hacia el firmamento.
por una cruz latina de cristal que fungirá como zona de tránsito que también tendrá doble función, como tragaluz y pantalla de luz hacia el firmamento.
Dadas las necesidades que surgen en un recinto de esta magnitud, cada cuadrante estará destinado a alguno de los nuevos edificios que se agregarán al complejo, todos de dos niveles, conectados por una zona central de tránsito, una zona de servicios públicos federales y dos estacionamientos: el general para 290 vehículos y el del mercado para 186 unidades. La forma que se eligió para desplantar el proyecto, coincide con el escudo pontificio del extinto Papa Juan Pablo II.
Los cuatro edificios que serán entregados en esta segunda etapa del proyecto son:
• Un Centro de Evangelización de más de 9,900 m2, destinado a usos múltiples, que contará con aulas, auditorio, oficinas de atención al peregrino y demás instalaciones que le permitan a la Iglesia desarrollar su labor pastoral.
• 120,000 nichos funerarios y capillas para recordar a los difuntos, en un Columbario con más de 53 mil 144 criptas en la planta baja y 61 mil 248 en el primer piso. La planta está diagramada en óvalos concéntricos, cuyo vórtice conduce a una Capilla central bajo la luminosidad de miles de vitroblocks dispuestos topográficamente para proyectar la silueta y color de la imagen de la Virgen de Guadalupe. El techo del edificio de Criptas será además una plaza a cielo abierto en donde el peregrino podrá admirar el tragaluz-vitral guadalupano y las 27 advocaciones marianas de América, que serán expuestas en el muro poniente del Museo Interactivo.
• Un mercado, que será administrado por el Gobierno de la Delegación Gustavo A. Madero, con 10,000 m2 de superficie para locales y 3,382 m2 de estacionamiento.
• Un Museo Interactivo que tendrá un área de construcción de más de 7 mil metros cuadrados, lobby, vestíbulo y cafetería; contendrá también un centro de atención gratuita al peregrino con 16 consultorios, sala de espera y áreas administrativas. En el edificio del museo se construirán también poco más de 500 m2 de locales comerciales, que contribuirán también al mantenimiento del conjunto a futuro.
Toda esta obra totaliza 67,256.70 m2 de construcción, con una generación de 800 empleos directos, 2,000 indirectos, y más de 800 mdp de inversión directa, más el donativo que representa la infraestructura del Columbario que administrará la Basílica, que según algunos cálculos ascenderá a unos 2,400 mdp, dinero que se destinará en mayor parte al mantenimiento y desarrollo de las instalaciones del conjunto en general a futuro.
Cabe resaltar que la donación de esta gran obra por parte de la Fundación Carlos Slim, va más allá de la inmediata construcción de un proyecto que se creía perdido, ya que la magnitud de los acuerdos logrados en torno de esta Plaza Mariana, detonará el desarrollo de la región que la contiene, el Centro Histórico de la Delegación Gustavo A. Madero, zona norte, creando un círculo virtuoso que recuperará varios de los edificios y vialidades que circundan el sitio y permitirá que la calidad de la región siga creciendo en beneficio de la sociedad que la habita, creando más empleos con mejores condiciones de vida, lo que hará que el beneficio de este donativo sea permanente.
Durante la inauguración de la primera etapa de la Plaza Mariana en diciembre de 2010, el ingeniero Carlos Slim Presidente de la Fundación Carlos Slim, consideró un gran honor su participación y respaldo en este proyecto, así como una gran satisfacción. También destacó el esfuerzo del Gobierno del Distrito Federal y de la sociedad civil, en la realización de esa primera etapa del proyecto que se llevó a cabo en poco más de cinco meses. Más tarde, agradeció la confianza del cardenal Norberto Rivera, así como la comunicación que se dio con el gobierno de la Ciudad y la Delegación Gustavo A. Madero para la edificación de esta plaza, a fin de que esta zona tenga un mejor entorno y mejores servicios para los peregrinos. La segunda etapa será concluida el 12 de octubre del presente año, y otorgará al Santuario Guadalupano del Tepeyac de una nueva dimensión, en la que el trabajo conjunto entre la iniciativa privada, el Gobierno del Distrito Federal y la sociedad civil, dio como resultado una recuperación urbana real, en beneficio de la población en general.
Historia
Desde tiempos prehispánicos, la Sierra de Guadalupe y en particular, el cerro del Tepeyac, han sido punto de destino de peregrinaciones provenientes de los distintos puntos de la geografía del actual territorio de México; existía ahí un templo dedicado a Tonantzin (nuestra madre venerada, en náhuatl), y fray Bernardino de Sahagún lo describió así:
La imagen de Tonantzin nos remite al sincretismo entre esta deidad de los antiguos mexicanos, y la Virgen María, madre de Jesús, en la religión católica; Tonantzin representa a la madre, la tierra que provee y alimenta a sus hijos, la patria o en sentido más estricto, la matria. Podía ser Coatlicue (la de la falda de serpientes, madre de Huitzilopochtli, símbolo de fertilidad), Omecíhuatl (mujer dos, parte de la deidad dual creadora), Chicomecóatl (siete serpientes, señora de la subsistencia, del maíz, de la vegetación, en suma, de la fertilidad) del mismo modo que la Virgen de Guadalupe es una advocación de la Virgen María del Cristianismo.
Fue precisamente este cerro el testigo de las apariciones de la Virgen María ante Juan Diego, por lo que el sitio se convirtió en la casa de la Guadalupana, y poco a poco Tonantzin y Guadalupe se fundieron en una sola.
Según el Nican Mopohua, durante cuatro días la Virgen se comunicó en distintas situaciones con Juan Diego en su propio idioma, el náhuatl. El vocablo náhuatl que ella utilizó para referirse a ella misma, sonó a los oídos de los frailes españoles como el extremeño “Guadalupe”, nombre que se adoptó para denominarla en adelante. El culto a la Virgen de Guadalupe desde entonces, fue otorgándole mayor relevancia con el paso de los siglos, hasta convertirla en un símbolo que sirvió para aglutinar a los mexicanos en su lucha independentista primero, y al pueblo latinoamericano en años posteriores.
El conjunto de templos del Tepeyac
Como resultado del culto guadalupano, se fueron construyendo desde el siglo XVI templos de dimensiones y características propias de cada época, que sirvieron como casa y adoratorio para el ayate con la imagen de la guadalupana.
La Parroquia de Indios
La primera ermita dedicada a la Virgen fue construida por órdenes del obispo fray Juan de Zumárraga en 1531 al pie del cerro del Tepeyac, seguida por otra ermita erigida por el obispo Montúfar en 1556 junto a la anterior. Sobre los cimientos de estas dos, se construyó en 1649 una tercera ermita un poco más grande que las anteriores; es la llamada Parroquia de Indios, situada en el lugar en el que se supone que vivió Juan Diego sus últimos años, denominada así por la cofradía de indígenas que se estableció allí en 1679. Esta parroquia fue la cuarta en ser dedicada a la Virgen y es la más antigua que se conserva en el entorno del Tepeyac.
En el año de 1622 en el lugar que ahora ocupa el antiguo convento de las madres Capuchinas, se levantó el tercer templo dedicado a la Virgen, conocido como la capilla del artesonado por su techo de madera ricamente decorado; de esta capilla ya no se tiene resto alguno.
Juan Diego tomó las flores que colocó en su ayate, para después mostrárselas al obispo Zumárraga.
La capilla del Cerrito
En el año de 1666 se levantó una capillita en la cima del cerro del Tepeyac, dedicada a San Miguel Arcángel, custodio de la Virgen María, lugar en el que la tradición guadalupana señala que Juan Diego tomó las flores que colocó en su ayate, para después mostrárselas al obispo Zumárraga como prueba de las apariciones de la Virgen. Debido a la creciente cantidad de peregrinos que quería conocer el sitio exacto en el que tuvo lugar este milagro, sobre esta capilla fue construida una más grande en el año de 1749, cuya fachada se logró terminar hasta 1950.
Antigua Basílica de Guadalupe
El primero de enero de 1709, fue consagrado el quinto templo dedicado a la Virgen de Guadalupe; sus cuatro torres octagonales, su cúpula y el arco poligonal sobre la puerta principal, nos remiten al Templo de Salomón de manera simbólica, ya que según la Biblia, éste poseía esta misma geometría, la cual se emuló en el Tepeyac con la intención de resaltar el carácter sagrado del territorio de la Nueva España, sacralización que se había logrado gracias a la Virgen. En 1749 al templo se le concedió la categoría de colegiata, ya que sin ser catedral, poseería un cabildo regido por un Abad. En 1904 cambiaría nuevamente de categoría para ser reconocida como Basílica, palabra de origen griego que literalmente significa casa regia, gracias a la importancia que dentro de la Iglesia había adquirido. Debido a las características de las arcillas del subsuelo de esa región del Distrito Federal, la Basílica comenzó a presentar hundimientos diferenciales que con los años provocaron su cierre para poder ser rehabilitada. Los trabajos de nivelación de la Antigua Basílica comenzaron en 1976, y fue reabierta al público el 5 de mayo de 2000, fecha en la que el decreto del Arzobispo de México, Norberto Rivera la convirtiera en Templo Expiatorio.
Nueva Basílica de Guadalupe
Por causa del deterioro de la Antigua Basílica mencionado anteriormente, en 1974 se comenzó la construcción de un nuevo templo que fue consagrado el 12 de octubre de 1976. La nueva Basílica fue construida tomando en cuenta la afluencia cada vez más alta de peregrinos desde distintas partes del mundo, por lo que se escogió una planta circular de 100 m de diámetro de manera que las ceremonias y la imagen pudieran ser apreciadas aún por aquellos que no pudieran ingresar bajo su techo. Con un diseño del Arq. Pedro Ramírez Vázquez, puede recibir hasta 50,000 personas bajo la cubierta de láminas de cobre oxidado en verde que semeja una gran carpa como las que usaba el pueblo hebreo en el desierto, o el manto de la Virgen que cubre a sus hijos.
Recuperación y transformación del entorno urbano
El Gobierno del Distrito Federal por medio del proyecto del corredor turístico Centro Histórico-Reforma-La Villa, ha desarrollado un programa de recuperación de espacios públicos en esta zona, de los denominados Macro o escala de ciudad, por la autoridad del Espacio público de SEDUVI. La Plaza Mariana será un espacio que dará proyección a la ciudad y en favor de cerca de 9 millones de peregrinos que tan solo en este aniversario de la aparición de la Virgen de Guadalupe, se espera arriben al santuario guadalupano. En este sentido, el compromiso de la autoridades es el de garantizar los servicios y elevar y mejorar la calidad del espacio para los visitantes que no solo acuden durante los festejos de cada diciembre, sino todo el año.
Con esta recuperación del espacio público se beneficiará no sólo a la gente que habita en la delegación Gustavo A. Madero, sino también a los poco más de 20 millones de turistas y peregrinos que cada año visitan la Basílica, cifra que la convierte en el santuario religioso más visitado del mundo, con visitas por encima de la Basílica de San Pedro en Roma y de La Meca en Arabia Saudita.
En palabras de Marcelo Ebrard, Jefe de Gobierno del Distrito Federal: “Si tenemos el centro religioso más grande del mundo y si tenemos además la Basílica como uno de los símbolos más importantes en nuestra ciudad, entonces el espacio público, el acceso, la vista de todo lo que es nuestra Basílica, tiene que corresponder y tiene que estar a la altura de lo que eso significa, es una historia de éxito más, para los capitalinos y los millones de visitantes del recinto.”
Este proyecto de recuperación viene a ser una continuación del rescate del Centro Histórico de la Ciudad de México, y se puede comparar con lo realizado en el corredor Reforma y la Plaza de la República. El desembolso para estas obras por parte del Gobierno del Distrito Federal fue de 36 millones de pesos en su primera etapa, de los cuales 14 millones se destinaron a la construcción de las 3 plazas comerciales que rodearán la plaza, en las que los más de 1 000 vendedores ambulantes de la localidad serán ubicados; el resto será para concluir otros trabajos integrales de rehabilitación de la zona, con el fin de que el espacio público sea de más calidad como parte del proyecto integral de remozamiento del Centro Histórico de la delegación Gustavo A. Madero, y ayudar así a que los peatones transiten libremente por el entorno del recinto religioso.
Se intentará recuperar el entorno urbano con trabajos como la habilitación de zonas verdes, renovación de mobiliario urbano, y el reemplazo de más de 70 luminarias; además se reparó la red secundaria de drenaje y agua potable, se repavimentó con concreto hidráulico y se cambiaron banquetas, trabajos que serán complementados con algunas otras acciones en la zona en una segunda etapa, como son el reordenamiento del transporte y el mejoramiento de las vialidades aledañas, para las ocho manzanas que rodean a la Plaza Mariana, dándole vida a las calzadas de Guadalupe y de los Misterios, en el tramo que corre desde la Basílica hasta la glorieta de Peralvillo-Tlatelolco. Se ha planteado generar dos ramblas, similares a las que existen en el Barrio Gótico de Las Ramblas en Barcelona. Se buscará ampliar las zonas de vegetación, integrar al comercio, los hoteles y la infraestructura de las arterias, en un gran corredor turístico.
Plaza Mariana, reconversión del espacio urbano
Ing. Alfonso Salem Slim
Plaza Mariana es un proyecto muy trascendente que había estado detenido por mucho tiempo, por varias razones; tenía más de 10 años de haber estado en espera con diferentes propuestas.
La visión del Ing. Slim rescató el proyecto en el momento justo, porque todo fue resultado de una reunión en la que coincidió con el Sr. Cardenal, y había ya mucho ruido acerca de Plaza Mariana, que si el terreno, el mercado, etc., y él decidió donarlo en su totalidad a través de la Fundación Carlos Slim cumpliendo dos objetivos básicos:
1. Había que tomar este proyecto como una reconversión de una zona que ha sido trascendental para la ciudad y para el país; el volverle a llevar vida al Santuario Guadalupano, actualizarlo para que los jóvenes y las nuevas generaciones lo puedan vivir, fue un logro del Ingeniero, creando diferentes espacios, diferentes dinámicas. Del mismo modo el Jefe de Gobierno en la última visita de inspección a la Plaza Mariana, resaltó que gracias al apoyo de la Fundación Carlos Slim, este proyecto es el detonador de la regeneración de toda la zona que rodea a la Basílica.
2. La atención y el apoyo al Peregrino; a la Basílica acuden más de 20 millones de visitantes al año. En el mes de diciembre se acumula el 40% de esta cantidad y tan solo los días 12 y 31 de este mes se presenta cerca del 30% de total de los fieles que acuden cada año. Apoyar al visitante, con una nueva plaza, un centro de atención para los Peregrinos que presenten síntomas de deshidratación, llagas, desmayos, etc., y más servicios sanitarios.
Creo que es muy bonito el esquema con el que este proyecto se convierte en un ancla, que va a empezar a detonar muchas cosas positivas a su alrededor. La plaza se amplía en 10,000 m2, y se incluye un Columbario con aproximadamente 120,000 nichos y 4 locales comerciales, que va a servir para darle sustentabilidad al proyecto en el futuro, un Centro de Evangelización y Usos Múltiples de 9,900 m2 y un Museo Guadalupano de 7,500 m2.
También se construyo un nuevo mercado de más de 13,000 m2 incluyendo estacionamientos y que era un compromiso que existía con las autoridades del GDF y de la delegación Gustavo A. Madero para coadyuvar en la reordenación de los espacios comerciales que se está proyectando en la zona.
Si la Fundación Carlos Slim no hubiera rescatado este proyecto que tenía varios años detenido, en el momento en el que el ingeniero decidió intervenir, muchas cosas hubieran podido pasar, hasta la cancelación de la oportunidad de darle a este espacio la reconversión que requería. Al momento en el que le dimos certidumbre al proyecto, la detonación de la regeneración de la zona por parte del Gobierno del Distrito Federal a través de SEDUVI, también comenzó.
Se trataba de abrir más espacios para que el Peregrino pudiera vivir una experiencia más digna al visitar este complejo, como las plazas, el centro de evangelización, el museo y la dotación de más servicios como baños, un comedor, un centro de atención al peregrino y locales que pudieran contribuir al sustento del sitio. La idea es que más adelante se vayan haciendo más albergues, de manera de elevar la calidad de la estancia y de brindar más opciones y mejores espacios. Es un proyecto totalmente pensado para los peregrinos, tal y como aparece en la placa alusiva a la inauguración de la Plaza Mariana: “Construida y donada para el pueblo de México y para los peregrinos del mundo por la Fundación Carlos Slim”.
Cabe resaltar que este tipo de rescate es producto de la conjunción de diversas voluntades: de la iniciativa privada a través de la Fundación, del Gobierno del Distrito Federal y de la Iglesia. Es un proyecto que gracias a la visión y apoyo del Ing. Slim, a través de la Fundación, se pudo lograr. Implica un rescate de uno de los sitios más valiosos que tenemos en el país y en la ciudad, con obras que tienen mucho potencial y que a veces se quedan inconclusas porque no hay la conjunción adecuada de voluntades.
Para nosotros ha sido un proyecto muy especial por lo que representa para México y para tanta gente que lo visita al año; el poder colaborar en un proyecto de este tipo, de estas dimensiones, de este nivel, es muy satisfactorio. El equipo que hemos conjuntado, con arquitectos, ingenieros y trabajadores, es el mismo con el que hemos hecho muchas otras obras.
También estamos muy contentos con el tiempo en que se realizó. Un proyecto que tenía parado más de 10 años, fue tomado por la Fundación Carlos Slim en junio de 2010 y se entregó en octubre de 2011, con más de 68,000 m2 de construcción. Para lograrlo, contamos primero que nada con un proyecto realizable y razonable, y no por eso menos atractivo, con los colores de México, la Virgen y la cruz.
Reaccionamos rápido y planeamos la construcción con elementos prefabricados, al tiempo en que aprovechamos también las pilas de cimentación que ya existían, buscando siempre hacerlo más eficiente, de manera que se redujeran los costos de mantenimiento con la ayuda del Ing. Daniel Ruiz Fernández. Es importante resaltar que se aprovecharon los sótanos para construir un área de estacionamientos, incluso más grande que la que ya tenía. La motivación que nos ha inyectado el Ing. Slim, es la que nos hace trabajar a todos los que formamos parte de este equipo que mencionaba antes, con ese gusto por lograr los mejores resultados en el menor tiempo posible.
Ha sido altamente satisfactorio trabajar en un sitio que para la ciudad es muy importante, para el país es muy importante, pero sobre todo para la gente, para el pueblo de México y los peregrinos del mundo que tanto visitan esta Basílica.
Para nosotros, ha sido muy gratificante el colaborar en la tarea de regresarle su frescura a la Basílica con un proyecto actual y novedoso, que permita extender la capacidad actual del aforo de gente que recibe la Basílica, que impacte a toda la zona y que invite y provoque a los demás a mejorar el entorno urbano, creando un efecto dominó.
Es muy interesante cuando se interactúa conjuntamente en este tipo de proyectos, porque a final de cuentas todos perseguimos un mismo objetivo: que se haga y que sirva para bienestar de la ciudad, de sus habitantes y de los peregrinos.RE
Entorno de La Basílica de Guadalupe.
Por Marcelo Ebrard Casaubón
La Basílica de Guadalupe es el recinto Mariano más concurrido del mundo, recibe anualmente más visitantes incluso que el Vaticano en Roma, por ende es el destino turístico-religioso más importante del país, posee una significativa carga simbólica para la mayoría de los mexicanos, además de ser un espacio de culto con todo lo que ello implica, cuenta con elementos arquitectónicos, artísticos invaluables, como lo son; la antigua Basílica, el templo del Pocito obra singular de nuestra arquitectura barroca, la nueva Basílica obra del arquitecto Pedro Ramírez Vázquez y el Cerro del Tepeyac. Los anteriores elementos se articulan a la urbe principalmente por las calzadas de Guadalupe y la de los Misterios las cuales son las dos vías principales de acceso desde el centro de la Ciudad.
Muchos factores han incidido en las últimas décadas para que el entorno de la Basílica se fuese deteriorando, la suspensión por años para una necesaria obra en un extenso terreno contiguo al atrio de la Basílica, conocido como Plaza Mariana, hoy vemos finalmente concluido dicho proyecto que contribuirá a regenerar el área contigua al centro religioso.
Las calles, aceras y espacio público circundante se vio afectado por el arribo de gran cantidad de vehículos, tanto de transporte público como individual así como la salida de la estación del Metro Basílica, propiciando un uso indebido de la vía pública por la venta en ella de artículos religiosos, comida y diversos productos, además de colmar de obstáculos y barreras visuales el acceso. Aunado a ello el programa de Desarrollo Urbano de la Delegación correspondiente, presentaba contradicciones con el espíritu y vocación de está área histórica e identitaria de nuestra ciudad y del país entero.
Para revertir este círculo vicioso y convertirlo en virtuoso se han conjuntado las acciones, de la Iglesia Católica, del sector privado, de los vecinos, comerciantes y del Gobierno de la Ciudad en sus instancias local y central.
¿Cuáles son las medidas que se han tomado en los dos años recientes, y que veremos en un futuro inmediato?
1. Construir la Plaza Mariana en los terrenos que el Gobierno de la Ciudad había destinado desde hace años para tal fin, dicha plaza es una extensión del gran atrio y capilla abierta del conjunto de la Basílica y contendrá un mercado para un significativo numero de locales comerciales establecidos hasta hace años en la Calle de Fray Juan de Zumárraga, contará con servicios para los millones de peregrinos que acuden a ella, sanitarios públicos y un centro de salud, así como criptas y un museo de sitio. Esta es una gran obra de sesenta y ocho mil metros cuadrados, cuyas azoteas serán utilizadas como una extensión de la propia plaza, gracias a los esfuerzos de Grupo Carso y de la Iglesia se ha logrado la materialización de esta importante obra.
2. En segunda instancia, el Gobierno de la Ciudad, recupera y dignifica el entorno del remate de la Calzada de Guadalupe y la calle de Fray Juan de Zumárraga, en esta vía se construye un túnel para que los vehículos crucen por debajo del remate de la Calzada y con ello se logre un gran acceso peatonal al atrio de la Basílica desde ese punto.
Dada la necesidad de reverdecer dicho perímetro se construyen amplios taludes con vegetación que contendrán a su vez escalinatas y rampas de acceso para personas con discapacidad y locales comerciales bajo ellos, se logrará un significativo mejoramiento del espacio público al liberarlo del comercio informal, crear amplios espacios peatonales y de acceso universal para quienes ahí acuden.
3. El Gobierno de la Delegación de Gustavo A. Madero, ha hecho un gran esfuerzo por reubicar en plazas comerciales y en mercados a quienes realizaban actividades en la vía pública, se ha construido también en la esquina de Zumarraga y Calzada de Guadalupe una plaza comercial y reubicado el mercado de Villazona, a la par en el 2010 se elaboró y publicó el nuevo Programa de Desarrollo Urbano para la Delegación que reconoce la vocación histórica, simbólica y turística de esta área, el cual flexibiliza los usos de suelo para dar cabida a más inversiones y acciones que contribuyan al mejoramiento significativo del entorno y del ambiente social.
Estoy convencido de que la vía para mejorar las condiciones de vida y la calidad de la ciudad se logran mediante mecanismos de colaboración y entendimiento entre los sectores sociales, reconozco a cada uno de ellos, sus invaluables aportaciones y compromiso para este fin común.
El Gobierno de la Ciudad de México, consciente del valor que representa para nuestro pueblo este recinto, coordina a través de la Autoridad del Espacio Público estos esfuerzos para dignificar y colocar en el lugar que se merecen el entorno de la Basílica de Guadalupe, punto emblemático de nuestra cultura y de nuestra Ciudad.
Plaza Mariana, Espacio versátil de evangelización.
Monseñor Enrique Glennie Graue, Vicario General y Episcopal de Guadalupe y Rector del Santuario
La Basílica de Guadalupe es el templo más visitado del mundo, no sólo mariano, sino de cualquier denominación, con la característica de que quizá más del 90% de la gente que acude aquí, viene efectivamente a orar: es un verdadero centro de peregrinaciones. Creo que hay dos aspectos que hay que tener muy en cuenta: primero, el hecho de que la Basílica como tal, no tenía espacios adecuados para actividades que van conexas con el servicio y la atención a los peregrinos; evidentemente lo principal es que los peregrinos vienen a ver a la Virgen, vienen a rezar, muchos de ellos a confesarse, a oír misa, esos servicios que son propiamente de la Basílica como tal, están tratando de prestarse lo mejor que se puede.
Hay otro tipo de cosas que, vistas desde lo que es la tarea de la Iglesia, no había lugar para que se llevaran a cabo; me refiero a grupos de evangelización, promoción del acontecimiento guadalupano, centros de estudios, en fin, toda una serie de actividades que son necesarias en un lugar como este, y pongo dos comparaciones: una sería cualquier parroquia. Antes se pensaba en la parroquia como un templo y ya; hoy hay que pensar en oficinas, en casa del párroco, en salones para reuniones de los grupos, etc., espacios aparte del lugar de culto. Algo similar se podría aplicar aquí, aunque la Basílica no es una parroquia, pero el símil es válido. Por otra parte, haciendo otra comparación por ejemplo, en el mismo Vaticano tienen una de las actividades muy propias de allá, que es la que tie ne que ver con las audiencias del Papa; ahora las hace en la Plaza de San Pedro porque ya la gente acude en cantidades industriales, pero necesita espacios, ahí hay congresos, encuentros, exposiciones, etc., y tienen espacios que aprovechan en diversas formas, como el Aula Paulo VI, y otros lugares para poder tener una infraestructura y poder atender otros aspectos.
La Basílica no tenía nada de esto y la idea de la Plaza Mariana, visto desde el contexto del interior de la Basílica, es no sólo útil sino necesaria, para tener ahí reuniones de los grupos, poder tener como decía hace un momento, cursos, etc. En nuestra Arquidiócesis todo se ha replegado hacia el sur, todo se hace allá porque en el norte no hay nada. Entonces la idea es que la Basílica, además de ser este centro de culto y de acogida de los peregrinos que seguirán viniendo, sea también un lugar en donde se puedan realizar todo este tipo de cosas de una forma cómoda y adecuada. La Plaza Mariana está dividida en cuatro sectores; en un primer sector está el Centro de Evangelización, en donde tiene que haber un espacio versátil, para diferentes tipos de actividades como congresos, convenciones, exposiciones, conciertos, etc. Es importante que haya un lugar decoroso y decente, además que tendrá que tener lugares adyacentes en función de ofrecer un servicio, y que haya una posibilidad de servir. La idea no es poner ningún local comercial, y mucha gente piensa que la Plaza Mariana es una plaza comercial donde habrá tiendas de marca y otros.
No hay nada más alejado de la verdad que eso. Es un centro de evangelización, no para hacer de la Basílica un negocio, sino un servicio que tiene que prestar para diferentes actividades, sobre todo de evangelización. Un aspecto muy importante que nos sirve para evangelizar es la cultura. Aquí entre aspectos como música, archivos históricos, la biblioteca y el museo, el cual será otro de los cuadrantes. La idea es que ahí se ubique el museo guadalupano, pero añadiéndole una sala o espacio con medios interactivos mediante los cuales se pueda dar una explicación del acontecimiento guadalupano, de tal forma que se pueda diseñar el proyecto del museo, para que la gente pueda entender las obras y el contenido que éstas tengan, desde el punto de vista religioso. El tercer sector está dividido en dos, es una extensión del Atrio de la Basílica. Debajo está el espacio destinado para nichos de cenizas, primero para ofrecer a la gente un espacio en donde tener a sus seres queridos fallecidos cerca de la Virgen.
Y por otra parte, nuevamente visto desde otro punto de vista, también es un apoyo para el sostenimiento de la Plaza Mariana, porque todo esto genera gastos que a veces la gente no llega a calcular, todo lo que se paga de luz, permisos, seguridad, extintores, teléfono, personal; el mantenimiento se debe organizar con este apoyo que pueden dar las criptas para sostenimiento. Hay que reconocer la generosidad, el altruismo y el buen espíritu del ingeniero que está regalando todo esto, ésa es la palabra. El otro cuadrante es un mercado que tiene 10 mil metros cuadrados, estacionamiento e instalaciones. Tendrá una comunicación hacia la Plaza Mariana. Pero ese mercado se entrega al Cardenal y él lo entrega a la delegación, y nosotros nos desentendemos de todo lo que se refiera al mercado. La Basílica tiene un incremento de potencialidades, actividades y servicios que pueda dar a la gente.
La construcción de la Plaza Mariana ha incentivado el deseo del gobierno de mejorar el entorno de la Basílica. Al año, se reciben en ella a 20 millones de personas. ¿Cómo han aprovechado eso desde el punto de vista turístico? No se ha hecho. No hay nada en el entorno. No hay un hotel o restaurante decente. Este mejoramiento se está haciendo. Una vez que se termine el mercado, los vendedores ambulantes de alrededor serán reubicados. La perspectiva que tengo de la Plaza Mariana es que es algo que viene a darle un relieve mayor al entorno, y que es muy justo para todo el contexto del lugar en donde está la Virgen de Guadalupe.
Desde luego, el señor Cardenal está muy interesado y lo ha estado desde el principio. Hubo varios intentos de construcción, que por diversas razones no se concretaron hasta ahora. Con mucha rapidez, Grupo Carso ha construido este gran espacio para los peregrinos y la forma es un poco como el escudo del Papa Juan Pablo II. Hemos fijado la fecha de 12 de octubre para hacer la ceremonia de entrega, que en la Basílica es una fecha especial, pues también se celebra la Coronación Pontificia de la Virgen; y fue la fecha en que la imagen se trasladó de la Basílica Antigua a ésta. Es un reto difícil, pero muy interesante.
Diseño con discreción y funcionalidad.
Fernando Romero Enterprise
El proyecto “Plaza Mariana” fue una gran experiencia para el despacho FREE dirigido por Fernando Romero; desde su inicio el proyecto se planeó para no competir con la Basílica de Guadalupe, el destino religioso más visitado en el mundo. Esta discreción se refleja en los volúmenes y la construcción que se desarrolla más hacia abajo que hacia arriba. El programa incluye distintas funciones para el edificio y esto se representa en las diferentes tipologías de los volúmenes, manejando diversas transparencias y alturas; tiene como punto de partida la Cruz Mariana del pontífice Juan Pablo II, una cruz asimétrica que divide los cuatro bloques que forman el conjunto: Centro de Evangelización, Columbario, Mercado y Museo, aprovechando los cimientos del proyecto anterior generando un total de 67,256.70 metros cuadrados de área construida. Los accesos a dichos espacios se lograron a través de un andador principal de cristal (la cruz) que se conecta con el Atrio de las Américas formándose una conexión directa entre el viejo y el nuevo complejo, diferenciando este con cubiertas en color que reflejan la identidad nacional. Se le da una gran importancia al usuario final que es el peregrino, ya que el flujo de éstos llega en ocasiones a ser más de un millón en un día.
Otro de los grandes retos fue el desarrollo de una estructura racional y eficiente que pudiera utilizar los cimientos existentes. Fue así como se llegó a un grid de 12x12 de estructuras prefabricadas. Así mismo las fachadas son precoladas en medidas estándar, cambiando su ritmo en perforaciones secuenciales.
El programa está dividido en los siguientes cuatro volúmenes:
Centro de Evangelización que se desarrolla en dos niveles con una superficie total de 9,903 metros cuadrados; consta de un espacio que alberga un auditorio principal, así como áreas abiertas que serán utilizadas como salones de usos múltiples, aulas para enseñanza y oficinas administrativas. Cuenta con un espacio de estacionamiento en el nivel inferior, mientras que en Planta Baja se encuentra un comedor para peregrinos y una enfermería.
Virgen de Guadalupe
En el Columbario se encuentran más de 120,000 nichos, además de espacios abiertos que albergan capillas, zonas de ofrendas y otros programas. Adosado al edificio se encuentra con un área de baños para peregrinos. La plaza sobre este volumen es un espacio público, en su centro hay una representación de la Virgen de Guadalupe hecha con perforaciones en el piso. Durante el día este elemento aportará luz natural al interior de las criptas, mientras que por la noche irradiará hacia la plaza. Desarrollado en dos niveles con un total de 16,718 metros cuadrados.
El área de Mercado está dividida en 3 niveles considerando el estacionamiento, con una superficie de 13,045 metros cuadrados; sus áreas interiores se conectan por una rampa central y una lateral. En la franja que conecta al Atrio con el conjunto, y bajo las escalinatas que dirigen a la plaza sobre el Columbario, se encuentra la zona para peregrinos, la cual consta de un área de comedores y servicios sanitarios.
El Museo consta de dos niveles de 7,356 metros cuadrados; enmarcan una de sus fachadas principales 27 advocaciones Marianas de Latino América. Cuenta con cuatro domos que filtran la luz natural hacia el interior lo que permite el ahorro de insumos eléctricos. A un costado a nivel de calle se encuentran algunos locales comerciales.
La experiencia de “Plaza Mariana” complementa la práctica de la oficina en edificios emblemáticos que transforman la traza urbana y la convivencia de millones de peregrinos.
Texto:Real Estate Market & Lifestyle, Alfonso Salem Slim, Marcelo Ebrard Casaubón, Monseñor Enrique Glennie Graue, Fernando Romero Enterprise
Foto: SEDUVI, GRUPO CARSO, GOBIERNO DEL D.F.