La pandemia del nuevo Coronavirus llegó a cambiar el paradigma sobre cómo la gente vive, trabaja y viaja, coinciden especialistas; por ejemplo, en el 2021, se hizo evidente cómo los sistemas híbridos permitieron a muchos profesionistas trabajar desde cualquier lugar. Además, trajo consigo un fenómeno denominado ‘La Gran Renuncia’.

En éste, 4 millones de personas renunciaron a sus trabajos de forma voluntaria, lo que dio un nuevo impulso al trabajo remoto para todos estos nuevos trabajadores independientes, mientras que el avance de la vacunación en diversos países ayuda a que los eventos corporativos y los viajes de negocios muestren signos de recuperación.

Según Nico Barawid, CEO y cofundador de la startup Casai, dedicada a la hospitalidad, “el sector se encuentra en una etapa de reinvención acelerada en donde están surgiendo nuevas oportunidades de crecimiento y desarrollo”.

En este sentido, y considerando que las necesidades del viajero de ahora son diferentes a las de antes, algunas de las tendencias que marcarán el turismo en el 2022 son:

-Reivindicación de las largas estancias. Uno de los principales cambios está basado en la cultura del nomadismo digital, que brinda la posibilidad de trabajar desde cualquier espacio, permitiendo a todos asentarse por largos periodos de tiempo en distintas ciudades del mundo.

-Cultura con un enfoque ‘Glocal’. El Consejo Mundial del Viaje y el Turismo (WTTC) señaló que el 70% de los viajeros planean gastar más dinero en sus viajes en el 2022. Aunado a esto, se verá reforzada la manera en que las empresas ‘sumerjan’ a los viajeros a la cultura local, crucial para la recuperación económica de los países, sobre todo de aquellos fuertemente golpeados por la pandemia.

-Lealtad reimaginada. En el 2021, diferentes estudios señalaron que los deseos y expectativas de los viajeros han evolucionado, por lo que las compañías, es decir, hoteles y aerolíneas, deberán reinventarse para ofrecer nuevas formas de experiencias.

-Un nuevo networking. Para los viajes de negocios, las compañías deberán construir relaciones para que las condiciones de viaje y estadías sean más flexibles en este sentido, con conexiones a internet de alta velocidad, o bien, un hub habilitado para llevar a cabo todo tipo de reuniones.