A raíz de la pandemia del nuevo Coronavirus, tanto el sector del turismo de lujo como la aviación privada mostraron un repunte significativo a lo largo de la contingencia.
Según datos de la plataforma de aviación ejecutiva JetsBooking, los vuelos internacionales privados aumentaron su demanda en casi 50 por ciento. Por otro lado, hoteleros aseguran que mientras plataformas de hospedaje como Airbnb tuvieron que enfrentarse a cierres, los hoteles de lujo reciben a huéspedes que buscan estancias más largas, incluso, que el periodo pre-pandemia.
Cifras dadas a conocer por el Fideicomiso de Turismo de Los Cabos (Fiturca), apuntan a que en 2019 el turismo de lujo representaba apenas al 5% total de turistas; en contraparte, desde junio de 2020 −cuando el destino reabrió sus puertas dentro de la ‘nueva normalidad’− este segmento representa ahora al 18 por ciento de los viajeros.
La directora de la agencia de viajes de lujo Kristal de Luz Yoyage, Ophelia Ramírez, refirió que los destinos más solicitados para practicar este subtipo del turismo son: Los Cabos, la Riviera Maya, Acapulco y Cozumel. Señaló que, con base en su experiencia, es la edad la que determina directamente la elección del destino, por lo que los grupos de riesgo viajarán a lugares turísticos cercanos, en tanto que los más flexibles han tomado vuelos más largos.
Por lo anterior, sostuvo que ve una gran oportunidad en este segmento en lo que resta de 2020, considerando que en este año los viajeros que en años pasados pasaban la Navidad y Año Nuevo fuera del país, optarán por un destino mexicano.
Islandia reinicia su actividad turística a quienes ganen más de 150 mil pesos
Otros destinos que han acudido a esta estrategia son Bermudas, Barbados, Islas Caimán y Estonia, con la finalidad de obtener ingresos extranjeros.
En el caso de Islandia, en particular, se implementaron cambios en su programa de visa de trabajo remoto para cualquier ciudadano extranjero al que no se le requiera una visa para ingresar al país, durante seis meses ininterrumpidos, siempre y cuando se cumplan ciertos requisitos, como: Primero, estar empleado en otro lugar; segundo, tener un salario que sobrepase los 150 mil pesos.
De acuerdo con Asta Gudrun Helgadottit, miembro del Partido Pirata y exmiembro del Parlamento, “la idea es atraer a profesionales de altos ingresos de Silicon Valley o San Francisco para que gasten su dinero aquí, y no allá”.