El urbanismo mexicano fusionado con diversas experiencias internacionales promueve, a través de Mejor Ciudad, el establecimiento de un marco en que se visualicen principios para la planificación, desarrollo, gestión y mejora de la urbe.

“La Ciudad de México es una de las metrópolis más diversas del mundo. Consideramos oportuno hacer una reflexión y, en el marco de la coyuntura política electoral que vive el país, lanzar el reto de replantear la visión del desarrollo urbano con un enfoque estratégico, equitativo, sustentable con visión de largo plazo, ya que actualmente no se ofrecen condiciones para que los habitantes satisfagan sus necesidades básicas por su crecimiento desordenado y su mala planeación urbana”, aseveró Carolina Rodríguez, directora ejecutiva de Mejor Ciudad.

En la capital, por ejemplo, los traslados llegan a durar hasta 2.5 horas, según la última Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares de INEGI; en tanto que en promedio, se destina 18% del gasto familiar al transporte, lo que significa 4% más que en educación (14%), lo que ha ocasionado una expansión incontrolada de la ciudad, que a su vez ha contribuido al aumento de la inseguridad.

En este sentido el organismo expuso que para construir una mejor ciudad se necesita:

Aprender a vivir de manera centralizada para acortar distancias para mejorar la calidad de vida.

Hacer barrios más seguros, caminables, comunicados y con sentido de pertenencia para prevenir delitos.

Participar ciudadanos, gobiernos e iniciativa privada para devolverle vida a los barrios para lograr una urbe más equitativa y segura.