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El informe anual de la consultoría en industria hotelera, JLL Hotels & Hospitality, dio a conocer que la resiliencia en el sector generó nuevas aspiraciones, experiencias y demandas.

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En el reporte ‘Hotel Investment Outook’, se menciona que los activos hoteleros deben mantener su agilidad y replantear su oferta de productos para seguir siendo competitivos. Si bien añade que la recuperación “será larga”, señala que se espera que la demanda acumulada impulse el desempeño del sector hotelero en todos los mercados.

Con base en lo anterior, la consultora enlista cuatro tendencias que regirán en 2021, en el corto plazo:

  1. Las preferencias de los viajeros impulsan el rediseño y la aceleración de procesos tecnológicos. Luego de que las restricciones se vieron flexibilizadas, los consumidores mostraron preferencias en cuanto a las habitaciones de hotel, por ejemplo: Por las privadas, individuales o con mayor amplitud.

Asimismo, las instalaciones, las reservas anticipadas y los procesos check-in sin contacto llegaron para quedarse.

 

  1. Seguirán siendo los grupos de capital de riesgo los inversores en los activos hoteleros de 2021, considerando que, de acuerdo con el informe, el año pasado se captaron más de 24 mil millones de dólares en fondos de capital fijo centrados en lo activos hoteleros y de alojamiento a nivel mundial.

 

  1. Las inversiones inmobiliarias con principios medioambientales, sociales y de buen gobierno cobran un papel fundamental ante el creciente protagonismo de justicia racial, que van de la mano de las iniciativas de diversidad e inclusión.

 

  1. La estructura manchise muestra una tendencia creciente y en evolución al ofrecer a los propietarios una mayor flexibilidad a la hora de seleccionar una marca hotelera. Así mismo, incrementa la competitividad frente a gestoras externas.