Por: Real Estate Market En entrevista, Ebrard dijo que la Consejería Jurídica analiza el caso a detalle, pero que no ve riesgo de tipo jurídico por el por el recurso de revocación del decreto de expropiación que presentó el banco HSBC ya que los predios que fundamentan el alegato no fueron expropiados. HSBC declara que se vio afectado ya que el proyecto de la Supervía ocupa una parte de un predio donde tienen contemplado construir un desarrollo inmobiliario. Ebrard comentó que ya han pagado al 90% de los predios expropiados en la colonia Malinche y que están trabajando en la parte que corresponde a la delegación de Álvaro Obregón, aunque señaló que ahí hay menos casos de predios expropiados. El Jefe de Gobierno se defiende diciendo que no lo pusieron en el cargo para quedar bien, sino para tomar decisiones y llevarlas a cabo, de la manera que el mejor entiende, "para que la ciudad salga adelante. Insistió en que la obra ayudará a los habitantes de las delegaciones Álvaro Obregón, La Magdalena Contreras, Tlalpan, Cuajimalpa, Xochimilco y una parte de Miguel Hidalgo para que no tengan que invertir todos los días de una a dos horas, como sucede actualmente, sin aclarar si había otras formas de lograr los mismos resultados, afectando menos intereses. Lo que sí es que dijo que esta obra se realiza con recursos de la iniciativa privada para evitar dejar de hacer otras obras como el Metro, las líneas del Metrobús, que se realizan con recursos públicos. La gente está descontenta, además, porque se pretende cobrar el uso de la Supervía, a lo que Mario Delgado, secretario de Finanzas del Distrito Federal, argumenta que las tarifas se acordarán en función de cuánto la gente está dispuesta a pagar, ya que se corre el riesgo de que la vía se sature o que nadie la utilice. Por último, es pertinente señalar que según asambleístas del PAN, el proyecto de la Supervía contraviene al plan verde del Gobierno del Distrito Federal y ocasionará un daño "irreversible" a las áreas de valor ambiental de Tarango.