Por ejemplo, la compañía cementera Cemex durante la tercera semana de enero avanzó casi 11% en el precio de sus acciones en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), lo que se atribuye a la posibilidad de que participe en el polémico proyecto de la construcción del muro en la frontera con México.

La cementera tiene 12 plantas en territorio norteamericano, que representan 29% de sus ingresos totales y tiene presencia en entidades claves como Texas, y en los últimos años se ha beneficiado del crecimiento del sector residencial.

En noviembre pasado, Enrique Escalante, director de Cementos Chihuahua, había dicho que la empresa que él dirige no podía ser selectiva, ya que era un productor importante en esa zona “y tenemos que respetar a nuestros clientes en ambos lados de la frontera", señaló.

Cementos Chihuahua con cuatro plantas en Estados Unidos y con 77% de sus ingresos provenientes de ahí, destacó que en los últimos meses su crecimiento es más fuerte en esa nación.

Por ahora, aunque el muro es un tema en el que los analistas no lanzan muchos pronósticos sobre la participación que podrían tener las empresas mexicanas, sí destacaron la coyuntura.

Armelia Reyes, especialista en infraestructura de Signum Research, confirmó que esta reacción tiene que ver con el plan de la construcción del muro, donde la cementera mexicana ha incrementado su presencia.

Es una respuesta a las perspectivas que tienen los inversionistas en el sector y en donde tendrá oportunidad esta empresa, así como otras mexicanas, como Mexchem, aseveró.

En su oportunidad, Miriam Flores, de Grupo Invex destacó que los inversionistas parecen mostrar una expectativa positiva sobre la demanda de cemento en Estados Unidos por la posibilidad de un mayor gasto en infraestructura.

Prueba de ello es que el presidente Donald Trump eligió a Elaine Chao como titular del departamento de Transporte, y dijo ya que una de sus prioridades será establecer una unidad especializada de infraestructura para el país.

Lo anterior, para echar a andar la construcción y modernización de carreteras, aeropuertos y puentes y por supuesto, insistir en la construcción de un muro en su frontera norte, y aseveró que entregará un paquete de reconstrucción masiva al Congreso dentro de sus primeros 100 días en el cargo.

Como se recordará, la propuesta de Trump es una Ley de Energía e Infraestructura que busca detonar las alianzas público-privadas y las inversiones privadas a través de estímulos fiscales, para impulsar un billón de dólares en inversiones en infraestructura durante 10 años.