Jaime Jiménez, director general de Trane, apunta que la firma ofrece sistemas energéticamente eficientes y responsables con el medio ambiente, y que entre sus objetivos está cortar la huella de refrigerante de gases de efecto invernadero (GEI) de sus productos en un 50% en 2020 así como incorporar alternativas con menor potencial de calentamiento global (GWP) para el 2030.

De acuerdo con Abilia Inteligencia Inmobiliaria, los edificios son los principales consumidores de energía a nivel mundial con un 40%, por lo que Trane recomienda a las empresas integrar soluciones energéticamente eficientes que mejoren la administración y operación de los inmuebles así como complementar estrategias que incluyan la reducción de la demanda pico de energía y la reprogramación de los sistemas de automatización de edificios para ajustarlos al horario de operación de la construcción y sus niveles de ocupación.

Esto es posible, acota Jiménez porque el Internet de las Cosas (IoT) y elementos como los sensores y la tecnología inalámbrica, están permitiendo a los usuarios administrar, monitorear y controlar sus sistemas de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC), iluminación, seguridad, entre otros; desde cualquier dispositivo móvil para maximizar la eficiencia energética. La firma de International Data Corp (IDC) afirma que el mercado mundial de IoT tendrá un valor de 1.7 billones de dólares para el 2020, casi el triple al alcanzado en 2014.

Un edificio inteligente hace uso de toda clase de tecnologías con el fin de automatizar sus sistemas, obteniendo resultados significativos en el ahorro de energía, mejor administración y mantenimiento, y hoy esto es posible lograrlo en cualquier edificación (edificio, centros comerciales, naves industriales, casas, etc.).

Trane es líder global en soluciones y servicios de confort para interiores y una marca de Ingersoll Rand, y este año está celebrando 25 años de operar en México. En el 2013 cumplió 100 años de su creación en Estados Unidos.

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