El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado sostuvo en su análisis semanal que ante la situación adversa que vive México en lo económico, social y sanitaria, el gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador sólo se ha dedicado a culpar a gobiernos anteriores por las afectaciones que padecen amplios sectores de la población.
“Después de poco más de dos años de las elecciones presidenciales el gobierno recurre, cada vez más frecuentemente, al discurso de campaña; que continúa asignando culpas a gobiernos anteriores de los males que aquejan actualmente al país. Parecería no percatarse que el contexto en el que se mueve el país y el mundo entero cambió radicalmente”, destacó el Centro.
La institución agregó que a lo anterior se suman diversas políticas no claras que han frenado la inversión y que no abonan a la transparencia.
Mensajes contradictorios
“Antes de tomar posesión, tras el triunfo de las elecciones presidenciales, la constante de la administración (del Presidente) ha sido una combinación de mensajes confusos; cambios en las reglas del juego para la inversión, falta de transparencia y ataques de varias formas a las empresas y a la iniciativa privada”, ahondó.
El Presidente dará a conocer su Segundo Informe de Gobierno, ante el cual, el organismo augura hasta un lustro económico perdido que llegaría, de inicio, hasta 12% en la caída del Producto Interno Bruto (PIB) al cierre de 2020, debido a la crisis del COVID-19.
“Considerando los pronósticos de los especialistas del sector privado reunidos en la encuesta mensual del Banco de México, se puede anticipar que sería hasta 2025 cuando el Producto Interno Bruto (PIB) del país pudiese recuperar su nivel de 2018”.
Lo anterior implicaría, según el CEESP, que el Gobierno de la 4T concluiría con una caída acumulada del producto de cerca de 2.0%, que en términos per cápita, dicha reducción se situaría entre hasta en 8%, puntualizó el CEESP.
Finalmente, el organismo señaló que tan solo recuperar los puestos de trabajos formales medidos mediante la afiliación al IMSS, que se perdieron entre marzo y julio de este año, que llegaron a más de un millón 177 mil, podría recuperarse, por lo menos, en tres años.