A su interior, las actividades primarias (agricultura y pesca) crecieron 3.5% en términos reales, las secundarias (industria manufacturera y minería) 1.2% y las terciarias (comercio y servicios) 0.8%.

En términos anuales, el PIB creció 2.8% y por grandes actividades económicas, las terciarias crecieron 3.7%, las primarias 2.7% y las secundarias 1.9 por ciento.

Con estos datos, Hacienda recortó su pronóstico de crecimiento del PIB para este año de un rango de 2.6% a 3.6% a un rango de entre 2.2% y 3.2 por ciento. El Banco de México maneja un pronóstico que oscila en un rango de 2% y 3 por ciento.

De acuerdo con Hacienda, la rebaja del pronóstico obedece a una evolución menos favorable de la economía de Estados Unidos, principal socio comercial de México, en tanto que hacia adelante entre los mayores riesgos que enfrenta la economía mexicana es el comportamiento del precio internacional del petróleo.

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