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México vivirá el resto del año una aguda astringencia crediticia, con muy pocas alternativas de financiamiento, por lo que las autoridades deberán tomar medidas urgentes para evitar la paralización de la canalización de recursos, alertó el IMEF
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Por Notimex CIUDAD DE MÉXICO.- México vivirá el resto del año una aguda astringencia crediticia, con muy pocas alternativas de financiamiento, por lo que las autoridades deberán tomar medidas urgentes para evitar la paralización de la canalización de recursos, alertó el IMEF. El presidente nacional del organismo, Pedro Núñez Rodríguez, aseveró que "dejar a la economía sin flujos de financiamiento, es como dejar a un cuerpo humano sin sangre". Aclaró que, aunque el sistema bancario mexicano presenta una solidez aparente, los flujos de crédito se han reducido sustancialmente y se han encarecido. Puso como ejemplo que en el sector vivienda se han caído los créditos hipotecarios y la aversión de los fondeadores hacia los intermediarios especializados en este sector, se ha traducido en la escasez de financiamiento. Asimismo, dijo, se han parado las colocaciones a través de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) para la obtención de recursos en el caso de capitales y en deuda, las renovaciones han ido a marchas forzadas a pesar de las garantías parciales de la banca de desarrollo. En ese sentido, el presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) propuso, para reactivar los créditos interbancarios, que las autoridades provean un esquema de garantías condicionadas a que los bancos reactiven los créditos a la economía. Asimismo, demandó un cambio en el régimen de inversión de las Siefores que le permita dar profundidad al mercado sobre todo en financiamientos de largo plazo como en obras de infraestructura y poder hacer inversiones de mayor riesgo. Núñez Rodríguez sostuvo en su mensaje en el marco del Simposium IMEF 2009, que por ello también es necesario reforzar el Estado de derecho, para contar con la certidumbre jurídica que facilite el otorgamiento de crédito. Consideró además que las autoridades deben obligar a las instituciones bancarias a que cumplan con el objetivo esencial de su concesión y que lleven a cabo su función de intermediación financiera canalizando al crédito la captación de sus recursos. "La banca debe hacer banca, otorgando créditos en base a la capacidad de generación de flujo de las empresas y no condicionado a la otorgación de garantías reales o de fuentes alternativas de repago", subrayó. Destacó además que el mercado debe ser el que determine las tasas de interés y comisiones en un marco de libre competencia y que el gobierno solo actúe como árbitro, lo que propiciará que los bancos se sientan más incentivados a dar crédito. Se debe también fortalecer la calidad de la supervisión de las instituciones reguladoras, recomendó el presidente nacional del IMEF. "La paralización de flujos de financiamiento en una economía tiene efectos nocivos y todos los participantes debemos estar totalmente concientes del peligro a que nos podemos enfrentar", alertó.