Por Notimex CIUDAD DE MÉXICO.- En los últimos cinco años se ha duplicado el número de usuarios de servicios financieros en México, de acuerdo con una encuesta reciente de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP). El subsecretario del ramo, Alejandro Werner Wainfeld, informó que entre 50 y 57% de la población utiliza servicios financieros, según los resultados de la "Encuesta sobre uso de servicios financieros 2009", realizada por la propia dependencia. Estas cifras, dijo, representan un incremento sustancial con respecto a los últimos datos de una encuesta del Banco Mundial (BM), que hace cinco años "indicaban porcentajes de alrededor de la mitad de los que acabo de mencionar". En el marco de la clausura de la ceremonia por el décimo aniversario de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), destacó que estos datos muestran los avances logrados en materia de inclusión financiera. "Para nadie es un secreto que la adecuada y eficaz protección de los derechos de los usuarios de los servicios financieros es un tema que hoy preocupa con justa razón a toda la sociedad, no sólo en México, sino alrededor del mundo después de los problemas que hemos visto en los últimos dos años", añadió. Expresó que la inclusión financiera es un reto para el gobierno federal, ya que las estadísticas revelan que en la medida que la población utiliza los servicios financieros, mejora su calidad de vida, pero también en algunos casos, la falta de conocimiento y de información representa un riesgo que debe atenderse. "El caso extremo de esta falta de información que hemos visto en otros mercados es el de las hipotecas de baja calidad, que ha generado un problema a las familias que contrataron estos servicios financieros y que fue el foco inicial del problema financiero que vemos en los mercados de Estados Unidos y de otros países desarrollados", ejemplificó. Por ello, señaló el funcionario, la bancarización y la protección al consumidor de la industria de servicios financieros representan un reto para el gobierno, y una agenda en estas materias cobra una relevancia adicional para el sano desarrollo del sistema y de la economía nacional. Subrayó que su importancia se incrementa de manera importante ya que los efectos benéficos del sistema financiero sobre los sectores más necesitados de la sociedad claramente se ven potenciados por una buena agenda de protección al consumidor. Dicha agenda, dijo, debe sustentarse en tres pilares: Una estrategia permanente de educación financiera; incrementar la transparencia de los diferentes productos financieros; y la regulación de prácticas cuyas implicaciones no son correctamente entendidas por el público en general, con base en una educación financiera e información promedio. En opinión del subsecretario de la SHCP, el balance entre estos tres pilares tiene que dar un equilibrio propicio entre una bancarización rápida y una protección al consumidor de servicios financieros justa. Para ello, comentó, las autoridades financieras están diseñando la Estrategia Nacional de Educación Financiera alrededor de cuatro líneas de acción: Definición de un marco que cubra todos los segmentos de la población. Así como una coordinación con los participantes del sector público y privado, y otras instituciones; una estrategia de comunicación, y buscar que la educación financiera sea una asignatura curricular y de continua actualización. "Los resultados indican que vamos en la dirección correcta. No es tiempo de limitar los esfuerzos y se debe continuar trabajando para que este proceso de inclusión financiera en México se desarrolle de forma obligada y se logre el balance apropiado entre bancarización y protección al consumidor", afirmó. Esto, resaltó Werner Wainfeld, a fin de tener un sistema financiero más sólido que beneficie a la población de menores recursos y a la población en general, y que su impacto sobre el desarrollo económico del país sea mayor.