En todo el mundo el cemento participa de manera significativa en diversos sectores de la construcción y con el tiempo se ha convertido en el material más usado por el ser humano después del agua. La utilización de un cemento que no cumpla las normas de producción puede afectar de forma directa al tiempo de duración de las construcciones, tanto de infraestructura de servicios como de desarrollos urbanos.
|CEMEX
La buena noticia es que la mayor parte del cemento mexicano cuenta con las plantas más modernas del mundo, y para lograr una mayor eficiencia por kilo de producto las empresas se ven obligadas a buscar tecnología de avanzada que optimice al máximo las enormes cantidades de energía que utiliza para su producción.
"La industria del cemento en México produce cerca de 32 millones de toneladas al año y ve con optimismo un crecimiento cercano a 5 % en el 2004. En la industria del concreto premezclado se espera un crecimiento superior a 10 %, y se estima que la producción de este año será de entre 16 y 17 millones de metros cúbicos", señaló Jorge Sánchez Laparade, Presidente del Instituto Mexicano del Cemento y Concreto (IMCYC).
Por su volumen de producción la industria del cemento mexicana es la segunda más grande de América Latina, y está conformada por seis grupos: Cemex México, Holcim Apasco, Cruz Azul, Moctezuma, Grupo Cementos Chihuahua y Lafarge Cementos. Entre todas suman 31 plantas, cuya capacidad de producción se acerca a los 45 millones de toneladas anuales y se sigue ampliando. Empresas como Cruz Azul, Moctezuma y Lafarge aplican actualmente inversiones para ampliar su capacidad de producción, y en el caso de Cemex para mejorar el desempeño de su base productiva y de distribución.
Según Sánchez Laparade, la globalización de la industria es la que explica la participación de los tres mayores grupos mundiales en el país, pese a la cual se caracteriza por un fuerte consumo local, sobre todo por la barrera de costo que impone el flete.
Trabajador de Cemex Realizando el acomodo de sacos de cemento.
Crecimiento de 5 %
Los participantes del mercado y analistas están de acuerdo con la proyección de 5 % en la industria del cemento para este año, luego de que en los dos años más recientes su ritmo de crecimiento fue de 2 %, promedio, superando, en dichos periodos, el desempeño de la economía en su conjunto.
Este crecimiento de la industria del cemento está relacionado con el repunte de la construcción de infraestructura, el sostenido y fuerte impulso que está recibiendo la vivienda y la fortaleza de la autoconstrucción. Durante el año 2002 el consumo de cemento fue de 30.8 millones de toneladas, mientras que en el 2003 estuvo cerca de 32 millones, de acuerdo con cifras que reportó la Cámara Nacional del Cemento (Canacem) a finales del año pasado. La capacidad instalada resulta suficiente para cubrir la demanda nacional, con plantas modernas y tecnificadas, con personal capacitado y con eficientes sistemas de logística y distribución.
En opinión de Antonio Taracena, Director General de Corporación Moctezuma: "El potencial de crecimiento del sector es enorme debido al rezago que hay todavía en la construcción de infraestructura". El directivo ejemplificó con el consumo per cápita promedio, puesto que mientras en nuestro país es de 300 kilogramos por habitante, en Japón es de 700 y en España es de 1000.
Taracena califica a la industria del cemento mexicano en este momento como sobresaliente: "Es una industria de vanguardia, que crece, que invierte enormes sumas de dinero, totalmente eficiente y comprometida con el medioambiente. Es una de las que tiene menor consumo de energía eléctrica en el mundo, en proporción con su necesidad, y en base al tipo y calidad de producto que provee. En México contamos con uno de los mejores cementos del mundo".
El ingeniero Gustavo Gastelum Gómez, Director de Relaciones y Comunicaciones Externas de Holcim Apasco, dice que dentro del ámbito de la construcción la vivienda ocupa el lugar más relevante, tanto en su construcción especializada como en la autoconstrucción. También la infraestructura en sectores como la energía, las comunicaciones, el agua, el turismo e instalación de industrias y comercio impactan directamente en el ritmo de crecimiento que tenga el sector cementero.
Excelencia industrial
Para Taracena el parteaguas de la industria fue el año 1995, cuando la fuerte crisis provocó que el consumo de cemento se contrajera 27 %, mientras el concreto se cayó en 52 %. La recuperación fue paulatina a un ritmo de 4 a 5 % anual, aproximadamente, hasta que en el año 2000 logra recuperar el nivel de consumo de 1994.
Sánchez Laparade coincide, y dice que inclusive comparado con el que producen los países industrializados cumple con holgura la normatividad vigente en el ámbito mundial (ver recuadro Calidad). Y aseguró que "la buena calidad de los productos utilizados, la tecnología que la respalda y la competitividad de las personas que lo trabajan permiten alcanzar las altas especificaciones de resistencia, durabilidad y estética que exige cada proyecto".
El Presidente del IMCYC señaló que la institución promueve el mejor uso del cemento y del concreto como una herramienta de protección hacia el consumidor final: "Estamos buscando que todos los usuarios, como los constructores, los contratistas, y todos los que se dediquen a construir inmuebles y obras de infraestructura tengan en sus manos las mejores prácticas, las mejores herramientas para hacer bien su labor y que obtengamos estructuras durables, seguras y que cumplan perfectamente para lo que fueron diseñadas".
La industria del cemento mexicano se transformó radicalmente en los últimos 20 años: primero, por pasar de más de 20 grupos empresariales en los años ochenta a los actuales seis grupos, y en segundo lugar, y lo más trascendente, el grado de competitividad gracias a su desarrollo tecnológico que la ha ubicado a la vanguardia mundial, expresó Roberto Sánchez Dávalos, Secretario del Consejo Directivo del Instituto Mexicano del Cemento y del Concreto (IMCYC) y ex presidente de la Cámara Nacional de Cemento.
Antonio Taracena
Director general del corporación Moctezuma.
La industria cementera se caracteriza por ser intensiva en capital, tecnología y utilización de energía. "En México, la tecnología empleada para producir cemento es en base al proceso seco, siendo éste mucho más eficiente y sustentable que el proceso húmedo que se utilizaba hace más de 20 años. Actualmente la industria cuenta con equipo y sistemas avanzados para cumplir con normas ambientales, tanto nacionales como internacionales. De hecho, la industria cementera es el único sector en nuestro país que en su totalidad cuenta con el Certificado de Industria Limpia", explica Gastelum. El directivo agrega que en materia energética, la industria cementera ha diversificado su consumo de combustibles, reduce año con año el consumo de energía por tonelada de cemento producida y sustituye combustibles tradicionales a través del coprocesamiento de residuos industriales en los hornos de sus plantas productoras, contribuyendo también a la disposición ambientalmente segura de estos materiales en México.
Guillermo Álvarez Cuevas
Director General de corporativa La Cruz Azul
Sánchez Dávalos destacó que es un sector intensivo en bienes de capital, sobre todo en el uso de tecnología, que además de competitividad productiva practica un cuidado por el medioambiente ejemplar, al grado de que ahora parece que las plantas están improductivas por ser una industria limpia. El especialista enfatizó el papel de las múltiples inversiones, que han contribuido en gran medida al desarrollo del país, tanto en la construcción urbana como en el desarrollo de infraestructura.
“Con más de 100 años de historia, la industria mexicana del cemento es un ejemplo de esfuerzo y motivo de orgullo nacional. Cito el caso de Cementos Moctezuma, cuya planta recién inaugurada en San Luis Potosí es la más moderna del mundo, la evolución histórica de Cemex, tanto a nivel nacional como internacional, y la presencia de los tres grupos cementeros más importantes del mundo en nuestro país, que hablan del grado de competitividad del cemento mexicano”, finaliza Dávalos.
Claves del negocio
En opinión de Alfredo Guillén, Director de Análisis y Estrategia de la Casa de Bolsa Interacciones, "la industria del cemento mundial es muy competitiva, de la misma calidad, y no hay ventajas diferenciadoras; aunque no hay un mercado mundial del cemento, como por ejemplo en el caso del petróleo. Es muy similar en todo mundo, por lo que no puedes decir que el mexicano tiene ciertas características que no tiene el americano, y por lo tanto no hay otras barreras de entrada a otros mercados más que las comerciales o políticas, es por eso que cuesta trabajo exportar cemento".
Sin duda una de las limitantes del cemento es el costo de transporte, porque a mayor distancia de su punto de fabricación o distribución más se incrementa el costo. Según Guillén: "Si ya tienes tu fábrica y tu centro de distribución el objetivo final es controlar toda la logística, hacer toda la ruta crítica suficientemente eficientes para bajar costos: por eso es que la distribución y presencia de las empresas es regional", sintetiza el especialista bursátil. Y prosigue: "Para crecer hay que comprar plantas o ponerlas en cierta área de influencia. Quien hace dinero en la industria del cemento es quien lo distribuye mejor y quien resuelve de manera más eficiente los costos y su flujo de efectivo o capacidad de endeudamiento".
Alfredo Guillén
Director de analisis y estrategia de la casa de bolsa interacciones
Guillermo Álvarez Cuevas, Director General de Cooperativa La Cruz Azul —única empresa del sector cien por ciento mexicana—, coincide: "Para tener una mejor idea de lo que esto significa, hay que señalar que al ser un sector intensivo en bienes de capital, para crear un nuevo plazo de trabajo en la industria cementera se requiere de un millón de dólares".
Guillén explica que al final de cuentas se vuelve una industria muy intensiva y estratégica en la inversión de capitales, en precisión de sistemas de cómputo, de distribución y de logística. Mientras que Álvarez Cuevas enfatiza la excelencia tecnológica como una de las grandes fortalezas del negocio.
PRECIO DEL CEMENTO
Recientemente se suscitó cierta polémica porque algunos medios de comunicación publicaron que el precio del cemento en México es de los más caros en el mundo. En particular, durante el primer trimestre del año el precio del cemento reportó un incremento nominal de 6 %, lo que fue considerado como excesivo para algunos sectores de la población.
Sin embargo, se debe considerar que en términos reales no ha sido un ajuste importante, incluso, por efecto de la mezcla de ventas de las empresas, el incremento en términos reales ha sido nulo. Gastelum dice que se ha modificado a un ritmo similar al de la inflación registrada: "El precio actual de una tonelada de cemento se ha mantenido en términos reales similar al que se tenía en enero del año de 1998, aun considerando el fuerte incremento a nivel internacional y nacional que han tenido los energéticos".
Guillén señaló que la inflación esperada para este año es de aproximadamente 4 %, mientras que los dos puntos porcentuales adicionales no significan incremento, porque los descuentos y promociones de cada una de las firmas llevan a que el precio promedio termine, en términos reales, en los mismos niveles del 2003.
Por ejemplo, algunas cementeras, como Holcim Apasco, reportaron una pequeña reducción en su precio en el primer trimestre; otro caso fue el de Cruz Azul, que los aumentó; en cambio, Cemex lo mantuvo en términos reales, lo que se explica por la diferente mezcla de ventas de cada una de las firmas.
De acuerdo con la Canacem, en México la mayor parte del cemento se comercializa por medio de la venta al detalle, principalmente en bultos de 50 kilogramos a través de distribuidores y contratistas, en comparación con economías desarrolladas en donde la mayor parte del cemento es vendido a granel. En México, las ventas del producto envasado equivalen aproximadamente a 80 % de la demanda, del cual 48 % es usado en el sector residencial y 32 % en el sector de autoconstrucción.
Gastelum detalla: "El déficit de vivienda en México es aún grande, ya que se requiere duplicar el número de viviendas existentes (23 millones, aproximadamente) en los próximos 20 años".
Por eso, es de suponer que este mercado sostendrá su crecimiento, la vivienda seguirá siendo un factor relevante en el ritmo de crecimiento del sector cementero nacional y, de su mano, la construcción de infraestructura.
Pocas empresas grandes proyectos
Tres de los grandes jugadores mexicanos forman parte de los más importantes grupos mundiales del
ramo. A nivel internacional la más grande es Lafarge, firma de capital francés que desplazó desde
el 2001 a Holderbank de la supremacía mundial, y adquirió la inglesa Blue Circle.
Le siguen, Holcim (de origen suizo), la mexicana Cemex, y en cuarto lugar la alemana Heidelberg. De acuerdo con datos del especialista bursátil consultado y cifras de las propias empresas, localmente Cemex es líder de mercado con 17 millones de toneladas colocadas el año pasado. La segunda posición es para Holcim Apasco, con cerca de siete millones de toneladas, y la tercera posición es para Cruz Azul que el año pasado vendió cinco millones de toneladas.
CEMEX, LA JOYA MEXICANA
Nació en 1906 y hoy es la tercera cementera mundial con al menos 60 plantas propias en 13 países, con operaciones en cuatro continentes. Su plan global de inversión de 400 millones de dólares (de los cuales 100 son para México), tiene como objetivo mejorar sus procesos de producción, reconvertir el uso de energéticos y hacer las plantas más eficientes. El año pasado, 92 % de sus plantas ya usaron un nuevo esquema de producción que se tradujo en una reducción de 40 % en el costo de energéticos. Produce 29 millones de toneladas anuales para marcas como Tolteca, Monterrey, Anáhuac, Maya, California, Centenario, Gallo, Atlante e Hidalgo, que están posicionadas fuertemente en cada región del país.
Aplicacion de cemento en grandes obras
Las expectativas de crecimiento de la empresa son de 11 % respecto al año pasado. Figura en lugar 375 del ranking de la lista de las 2000 de Forbes, en su edición 2004, y la mejor posicionada de las compañías mexicanas en general.
HOLCIM APASCO YA ES CIEN POR CIENTO EXTRANJERA
Tiene su origen en el año 1928, en el municipio de Apaxco, Estado de México, de donde se deriva su nombre original “Apasco”. Desde 1964 se convierte en una empresa donde el capital mayoritario es de la suiza Holderbank (hoy Holcim), aunque es a partir del presente año cuando su capital es cien por ciento de la segunda firma mundial más grande. Tiene presencia a nivel nacional a través de instalaciones modernas y eficientes, contando con seis plantas de cemento, más de 80 plantas de concreto premezclado, cinco plantas de agregados, 23 centros de distribución, dos terminales marítimas, un Centro Tecnológico del Concreto y una red de cerca de 2000 distribuidores. Su participación de mercado es de 23 % en cemento y 24 % en concreto.
CRUZ AZUL, LA AUTOCONSTRUCCIÓN
Peleando fuerte la segunda posición del mercado mexicano se encuentra la Cooperativa La Cruz Azul, con orígenes desde finales del siglo XIX en el Estado de Hidalgo, donde con capital inglés se formó una empresa de cal de la que surge la Compañía Manufacturera de Cemento Portland La Cruz Azul S.A.
Su Director General, Guillermo Álvarez Cuevas, comenta que en 1931 es adquirida por cementos La Tolteca, con la idea de cerrarla para monopolizar el mercado. Los trabajadores organizados, y apoyados por el gobierno del Estado de Hidalgo, lograron que en noviembre de ese mismo año pasara a sus manos, quienes la adquirieron en un plazo de 10 años. Su influencia llega a todo el país, tanto en el centro y en el sur de México, a través de tres plantas con una capacidad de 7.2 millones de toneladas y una fuerza de 550 distribuidores.
MOCTEZUMA, LA DE MAYOR CRECIMIENTO
Es la firma que en los últimos años ha tenido el mayor crecimiento. La penetración de mercado que ya logró es de 7 %; sin embargo, la misma empresa estima que con el inicio de operaciones de su nueva planta en San Luis Potosí llegarán a 11 % del mercado.
Nació en 1943, en el Estado de Morelos, pero es con la entrada del Grupo Carso y socios europeos, en 1994, cuando se le da una gran proyección, con fuertes inyecciones de capital, y se empieza a invertir, dijo su Director General Antonio Taracena.
Las eficiencias en el proceso les permitieron obtener 30 % más de la producción anual prevista, aumentar la cantidad de plantas de concreto premezclado de 8 a 30, y construir la planta Cerritos, en San Luis Potosí, que con 250 millones de dólares de inversión es, según sus directivos, la más moderna del mundo.
La constancia en las inversiones, aun en épocas difíciles, y su rápida respuesta orientada al servicio al cliente es lo que le permitió crecer.
DE CHIHUAHUA A ESTADOS UNIDOS
Grupo Cementos Chihuahua (GCC) fue fundado en 1941, en el Estado de Chihuahua. Actualmente cuenta con tres plantas locales y dos en Estados Unidos, con lo que su oferta cubre el noreste del país y tiene participación en siete estados de Estados Unidos, a través de sus subsidiarias como GCC Río Grande Inc. Su capacidad de producción anual es de 3.3 millones de toneladas, de las cuales 1.9 millones es de sus tres plantas en México y 1.4 millones de sus dos plantas en Nuevo México y Dakota del Sur, subsidiarias en Estados Unidos.
LAFARGE, RECIÉN LLEGADA
Como una paradoja, la más grande cementera en el mundo, Grupo Lafarge, con origen en 1833, es la firma más joven y pequeña en México bajo el nombre de “Lafarge Cementos”.
El grupo está casi recién llegado a nuestro país (1999), pero ya anunció importantes inversiones por 120 millones de dólares para ampliar a 600 000 toneladas anuales su capacidad de producción y poner a la vanguardia su planta instalada en Vito, Hidalgo, lo que aumentará su capacidad actual de 350 000 toneladas anuales en el año 2006, con una planta moderna, de bajos costos y estratégicamente ubicada en el mercado mexicano.
Cementeras Ecológicas
¿Qué hay detrás de la producción de cemento?
Entérese en esta nota sobre lo mucho y bueno que hay detrás del escenario de la producción industrial del cemento. Y cada vez que usted compre o construya recuerde que detrás de esos bienes hay compañías mexicanas preocupadas por su bienestar y el de nuestro entorno.
La mayoría de la gente no tiene idea sobre lo que algunas cementeras de nuestro país han implementado en su producción para reutilizar residuos tóxicos que se generan día a día, contaminando la tierra, los mares y los subsuelos.
Ecoltec, empresa mexicana, parte de la cementera Holcim Apasco, es un buen ejemplo. Es el primer proyecto en México —implementado de igual manera en Centroamérica y en América del Sur— cuya finalidad es minimizar la contaminación ambiental y recuperar al máximo posible los desechos que generan las empresas para su uso como combustible en el proceso de producción del cemento (ver recuadro). Esto permite que se reduzca de manera significativa la utilización del gas natural, que es un recurso no renovable, y que se reduzca la contaminación por los residuos mencionados.
Un ejemplo es el de los aceites que diariamente arrojan las refinerías, como es el caso de Industrias Pemex. Estos aceites —altamente contaminantes, que afectan a ríos, lagunas, mares e incluso a los suelos, o sea de manera directa a las napas de agua, que perjudican al ser humano— se recuperan para su aprovechamiento en el proceso de la combustión para la producción del cemento.
Otros ejemplos son los de la reutilización de llantas usadas —que normalmente cuando no se necesitan se queman, lo que genera alta contaminación en el aire— como combustible alterno para los hornos, así como la reutilización de la pintura, cuyo desperdicio se recopila y es tal la cantidad que llena camiones enteros que se destinan a los hornos.
En la extracción de petróleo marítimo se requiere de mucho combustible, que luego es desechado al mar. También, al comenzar la perforación sale un aceite que es dañino, a lo cual se llama “recortes de perforación”. Actualmente, este aceite es recuperado en enormes contenedores que se encuentran afuera de los pozos. Incluso, Pemex paga a las empresas que lo recopilan para que realicen su tratamiento. Ecoltec los toma para ser regados en cantera, como si fuera un abono para el mineral que usan para la fabricación del cemento.
Éstos son algunos de los ejemplos de la reutilización de residuos para cuidar la ecología en la fabricación de cemento en México.
*Luvia Graham es especialista en Ingeniería Ambiental
luvia_graham@hotmail.com