El impacto macroeconómico por los sismos será mínimo y eventualmente, el proceso de reconstrucción de escuelas, hospitales y mayoritariamente vivienda en las zonas afectadas, impulsarán una recuperación en la industria de la construcción.
Al margen de la lamentable pérdida de vidas, la crónica del desastre que ocasionó el terremoto del 19 de septiembre de 1985 en la Ciudad de México, arrojó un gran impacto sobre la economía del país; comparativamente, los datos indican que el efecto sobre el desempeño económico será marginal en lo que resta de 2017 y nulo para 2018.
En perspectiva, el sismo del 19 septiembre de hace 32 años, ocasionó la desaceleración del Producto Interno Bruto (PIB) en el último trimestre de 1985 y se vivió una recesión durante 1986, cuando experimentó una contracción de -3%; además del efecto negativo sobre el ritmo de crecimiento de esos años, también fue necesario recurrir en un mayor endeudamiento externo para la etapa de reconstrucción.
Es importante recordar que el país vivía a mitad de la década de los 80 una difícil situación macroeconómica, con finanzas públicas débiles, elevado déficit en la cuenta externa y un gran endeudamiento externo.
Daños menos extensivos
En opinión de los analistas de BBVA Research a través del análisis “Terremotos en México” dado a conocer en octubre de 2017, señala: “Más allá de las pérdidas económicas causadas por este desastre natural, los efectos palpables son limitados y solo son relevantes para regiones muy específicas, por lo que no generan un cambio importante en las tasas de crecimiento económico a nivel nacional”.
Resulta relevante el hecho que los más recientes terremotos no dañaron la capacidad productiva de la economía, ya que la infraestructura resultó prácticamente ilesa en su mayor parte; además, describen que el efecto principal a corto plazo fue la interrupción de la actividad en el sector servicios, pero su naturaleza fue temporal y solo relevante en el ámbito local (ciudades afectadas por los sismos).
Asimismo, consideraron que la economía probablemente repuntará en los próximos trimestres, debido a un impulso en la construcción, conforme el capital perdido sea reemplazado de manera gradual.
Viviendas dañadas en CDMX representaron 0.2% del inventario.
Al respecto, Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA Bancomer, señaló que la actividad económica bajó en la CDMX y otras ciudades afectadas por los sismos, pero que se verán contrarrestadas por las compras que se dieron por ayuda más los esfuerzos para la reconstrucción. Por ejemplo, las viviendas dañadas en la Ciudad de México apenas representaron 0.2% del inventario total.
Indicó que evaluaron muchos desastres naturales en el mundo y su efecto en cada economía, y la conclusión fue que la reconstrucción en cada caso termina siendo positiva a mediano y largo plazo. En general, a nivel mundial, la experiencia muestra que la reconstrucción compensa los efectos negativos de corto plazo.
Los desastres generan una reconstrucción positiva a mediano y largo plazo.
Infraestructura con afectación marginal
En el mismo sentido, el equipo de Análisis en México de Santander consideró que “la infraestructura productiva no ha resultado afectada más que en forma marginal y en todo caso (el daños es) muy localizado, pero en cambio hay afectaciones significativas en hogares e instalaciones sociales (hospitales y escuelas) en algunas zonas de la Ciudad de México, en algunas de Puebla, Morelos y el Estado de México”.
Por lo tanto, los impactos que anticipan en el crecimiento del PIB parecen moderados y de corto plazo. En el mediano plazo la tendencia de la economía no se ve modificada e inclusive será favorecida por los trabajos de reconstrucción y el gasto de apoyo y las donaciones efectuadas por la sociedad.
Las afectaciones significativas fueron en hogares e instalaciones sociales.
Su principal supuesto es que las actividades económicas regresaron muy rápido a la normalidad y en la mayoría de los casos no fue interrumpida. Las afectaciones principales tuvieron una duración de entre 3 a 5 días.
A manera de conclusión, los expertos de la institución financiera afirman que “el impacto en el crecimiento del tercer trimestre de 2017 sería de 1 y cuando mucho, 2 décimas. En el año 2017 en su conjunto mantenemos nuestro pronóstico de crecimiento del PIB en 2.5%. También consideramos que los impactos en la inflación serán marginales y de breve duración, por lo cual mantenemos nuestro estimado de 6.30% al cierre de 2017”.
El Colegio Rébsamen presentó irregularidades en su construcción.
Según la SEP, 19,800 escuelas resultaron dañadas.
Mejor preparados para contingencia
En el caso de la Dirección de Análisis Económico y Bursátil de Banorte, consideran que los eventos relacionados a los sismos de septiembre pasado, “tendrán un impacto muy limitado en la actividad económica, la inflación y las finanzas públicas”.
Su afirmación se sustenta en dos aspectos: el primero, al comparar la diferencia en los desastres ocasionados por el temblor de 1985 y el reciente. Ahora, el número de edificios derrumbados podría no superar los 50, en lugar de los más de 400 que se registraron en 1985, y es muy probable que el número de pérdidas humanas sea inferior a 400 frente a las más de 10,000 de los años ochenta.
Fundación Lala apoya afectados por sismo
La Plataforma Integral CDMX eficientó la entrega de apoyos.
Walt Mart México y Centroamérica donó 300 toneladas toneladas de básicos.
El segundo aspecto fue que en contraste con 1985, México salía de una de sus peores crisis en su balanza de pagos, justo después de la nacionalización del sistema bancario, que canceló prácticamente todas las inversiones del sector privado; actualmente, los fundamentales de la economía están muy estables y el Gobierno Federal creó un fondo para hacer frente a desastres naturales (Fonden), que actualmente cuenta con alrededor de 505 millones de dólares (mdd) y es muy probable que pueda reunir 280 mdd más.
|
Estado |
% PIB |
% Población |
% Territorio |
|
Chiapas |
1.6 |
4.3 |
3.8 |
|
Ciudad de México |
16.8 |
7.9 |
0.1 |
|
Guerrero |
1.4 |
3.0 |
3.3 |
|
Estado de México |
8.9 |
13.5 |
1.1 |
|
Morelos |
1.2 |
1.6 |
0.3 |
|
Oaxaca |
1.6 |
3.4 |
5.0 |
|
Puebla |
3.2 |
5.1 |
1.8 |
|
Tabasco |
3.2 |
2.0 |
1.3 |
|
TOTAL |
37.9 |
40.8 |
16.6 |
“Como resultado de estos desastres naturales, anticipamos un impacto muy limitado en el PIB, en contraste con lo que sucedió en los años ochenta después del terremoto”, afirma Banorte.
Adicionalmente, consideran que la destrucción no eliminó ni desaceleró el crecimiento del PIB per se, sino que es el número de días que el desastre impide que la actividad económica fluya, lo que llega a desacelerar el crecimiento económico.
90% de colapsos correspondieron a edificaciones anteriores a 1987.
Las principales afectaciones se dieron en Cuauhtémoc, Benito Juárez e Iztapalapa.
Participaron 90,000 elementos de fuerzas federales y 439 voluntarios de 13 países en labores de rescate.
Sin embargo, a pesar que el terremoto dejó edificios destruidos, lamentables pérdidas de personas, y cierto número de afectados sin hogar, la actividad económica no se detuvo en absoluto, con muy pocas excepciones en pequeñas ciudades y particularmente en zonas muy acotadas. De hecho, los esfuerzos de alivio de la población crearon un ambiente económico (de consumo) más dinámico en los días posteriores al sismo.
Por otra parte, afirmaron que como secuelas de los terremotos, los esfuerzos de reconstrucción temporalmente aumentarán la tasa de crecimiento del PIB, en particular, el segmento del PIB en construcción.
Inflación, con poco efecto
Para los analistas de Banorte, la inflación no se verá afectada de manera significativa por los eventos naturales debido a tres razones:
- La inflación en México no incluye materiales de construcción (desde 2010), que podrían enfrentar algunas presiones inflacionarias durante la fase de reconstrucción.
- El traspaso observado del Índice de Precios al Productor a los del consumidor ha sido relativamente bajo en los últimos años
- La Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) firmó un acuerdo entre sus miembros para evitar el aumento de los precios de los productos más demandados después de un terremoto.
Una cadena humana trabaja para remover los escombros de un edificio de la capital.
Como resultado, la trayectoria de inflación anual estimada permanecerá sin cambios, con una previsión de 6.4% para 2017 y de 3.8% para 2018.
Edificación impulsaría sector
El programa de reconstrucción que según cifras de la Presidencia de la República, constará de 48,000 millones de pesos, eventualmente tendrá un impacto positivo sobre la industria de la construcción.
Precisamente, este sector acumuló de enero a agosto de 2017, una contracción de -0.7% respecto al mismo periodo del año anterior, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI); el desempeño estuvo marcadamente por debajo de la economía en su conjunto, de acuerdo con estos datos. Mientras la construcción de obras de ingeniería civil ligó hasta el mes de agosto un periodo de 17 meses consecutivos con retrocesos en su índice de producción, la edificación perdió fuerza, y desde junio, acumuló tres meses consecutivos con retrocesos en su Índice de Producción.
Según Presidencia de la República, el Programa de Reconstrucción costará 48,000 millones de pesos.
La edificación, que fue el soporte del sector, presentó una caída en su producción a ritmo de -0.4% en el acumulado de los primeros ocho meses del año en curso.
En esta actividad, la revitalización y reconstrucción de viviendas, escuelas y hospitales, podría empujar a una mayor actividad del sector en su conjunto.
En el caso de la construcción de obras de ingeniería civil se contrajo de enero a agosto -8.6% respecto a periodo similar del año previo. Este segmento lleva 17 meses consecutivos con decrecimiento.
Los pronósticos de crecimiento para la industria de la construcción por parte de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), se ubican en un rango de entre -1% y 0.5% para 2017 y entre 0.3 y 1% para 2018. Finalmente, BBVA Bancomer prevé un crecimiento del sector de 1% para el presente año y 3% para el año venidero.
Texto Jesús Arias
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