Su objetivo es ser una empresa multinacional de tamaño mundial y buscan ser líderes de mercado en México y Estados Unidos, ofreciendo el mejor producto de tienda.

Con casi 70 mil empleos directos, quieren ser el mejor operador de tiendas de autoservicio, 40 mil de ellos en México y los 30 mil restantes en Estados Unidos.

Buscan crecer en donde la gente lo necesite y donde puedan ser rentables, con una buena apuesta en la Ciudad de México (CDMX), pero participando incluso en las ciudades chicas. Cada ubicación tiene que ofrecer lo que el cliente quiere y necesita.

El crecimiento de Chedraui se da de acuerdo como lo va pidiendo el mercado, pero su objetivo de corto plazo es abrir 18 tiendas. Además, en un formato chiquito, que se llama Supercito, con huellas de entre 300 y 500 metros cuadrados, están atacando Jalapa y la CDMX, en donde abrirán entre 20 y 30, pero sin límite para las aperturas.

Sus inicios en Estados Unidos ocurrieron por la invitación de socios para entrar a una tienda de autoservicios, donde buscaban a alguien que conociera el negocio. Al final se quedaron con la tienda y empezaron a abrir nuevas y comprar otras.

Hoy en día, las ventas en Estados Unidos son muy importantes para el grupo, con más del 60% de participación.

En México, la compra de la cadena de Carrefour en el 2005 fue determinante para entrar muy fuerte a la Ciudad de México. La compra de todos esos inmuebles, que tenía un componente de centro comercial, les ayudó a fortalecer su división inmobiliaria.

Las Plazas Cristales (seis o siete) fueron sus inicios en el mercado inmobiliario, pero luego hicieron dos centros comerciales, uno en Jalapa y otro en Veracruz, denominados Las Américas. Esto último, junto con la compra de Carrefour y el crecimiento orgánico que han tenido, han sido los grandes detonantes de Chedrui.

Chedraui Santa Fe, en la CDMX/Jaime Navarro.