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El mercado inmobiliario vertical en México ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años, especialmente en el segmento residencial.

El fideicomiso inmobiliario que renta mini bodegas aumentó su presencia geográfica con la compra de terrenos, dos en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, marcando la entrada a esta ciudad; el tercero se encuentra en la Ciudad de México, fortaleciendo presencia en la capital mexicana.

La administración del fideicomiso inmobiliario informó que dadas las oportunidades del nearshoring y el T-MEC continúa la demanda de espacios industriales, principalmente en el norte de México, al tiempo que las rentas se han encarecido y la ocupación se ha incrementado.

Este incremento se atribuye principalmente a un mayor nivel de ocupación, así como al ajuste de las rentas de ciertos contratos conforme a la inflación y al cobro de rentas variables anuales.

A medida que el mercado inmobiliario estadunidense continúa evolucionando y las tasas hipotecarias aumentan, los propietarios buscan alternativas a la compra de viviendas nuevas.